Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 4 de junio de 2025


Y el diputado siguió inclinado sobre su pupitre en el gabinete de escritura del Congreso, terminando su última carta, añadiendo un sobre más al montón de correspondencia que se apilaba en el extremo de la mesa, junto al bastón y el sombrero de copa. Era la tarea diaria, la pesada corbea de la tarde, que junto a él cumplían con gesto aburrido un gran número de representantes del país.

«Pasa, rata» replicó Moreno, que se acababa de dar un baño y estaba sentado, escribiendo en su pupitre, con bata y gorro, clavados los lentes de oro en el caballete de la nariz. Buenos días dijo la santa entrando; él la miraba por encima de los quevedos . No vengo a molestarte... Pero ante todo. ¿Cómo estás hoy? ¿No se ha repetido el ahoguillo? Estoy bien. Anoche he dormido.

Una tarde, Juanito, cuyo pupitre estaba próximo a la ventana, fue acometido de repente por una risa espasmódica, al parecer inmotivada y atentatoria a la disciplina escolar. Lo más que doña María pudo sacarle fue que alguien miraba por la ventana, y ofendida e indignada salió de su colmena para librar batalla al impertinente.

Pero si no sabemos gobernarnos nosotros mismos, ¿cómo hemos de gobernar al país? replicaba el inglés descargando golpes con la regla sobre el pupitre; lo que yo siento, es que aquí vamos a pagar justos por pecadores. En la calle el rumor de vehículos y transeuntes ensordecía; los muchachos pregonaban a grito herido los periódicos de la tarde.

¿Ahora salimos con ésas? gritó dando un golpe con la regla sobre el pupitre, que la hizo saltar en dos pedazos, yo soy un hombre honrado, señor Esteven, y en los tiempos que corren, en medio de la corrupción y de la podredumbre política y social que nos devora, un hombre honrado merece respeto.

Paseó largo rato por el vestíbulo, mascando rabiosamente su cigarro, hasta que se decidió á abordar al portero, cabeza morena y astuta que asomaba al borde de su pupitre, sobre unas solapas azules con llaves de oro bordadas, viéndolo todo, enterándose de todo, mientras parecía dormir. La aproximación de Ulises le hizo levantarse de un salto, lo mismo que si oyese el revoloteo de un papel-moneda.

Había un escritorio de caoba entre unos bonitos muebles y sillones de terciopelo. Había también cuatro cuadros con marcos dorados. Pero el objeto en que Marta fijaba los ojos, era un cofre con fuertes herrajes que estaba al pie del pupitre.

Toda la semana sentado ante el pupitre de mi negociado, trazaba en una hermosa letra cursiva, sobre el papel de oficio del Estado, estas frases hechas: «Ilmo. y Excmo. Sr.: Tengo la honra de comunicar a V.E... Tengo el honor de poner en conocimiento de V.I. etc., etcLos domingos descansaba.

Trata de sentarse a una de las mesas que hay esparcidas por la sala, sobre las cuales, para que nada llame y distraiga la atención, no suele haber ni pupitre, ni papel, ni plumas, ni tintero; nada más que la madera lisa y reluciente, invitando al estudio y a la patinación. Al tomar una de las sillas, observa con dolor que está cubierta de polvo y quizá de algo más. ¿Qué tiene esto de particular?

Quintanar no preguntó por su mujer; no era esto nuevo en él; solía olvidarla, sobre todo cuando tenía algo entre manos. Pidió luz para el despacho, se sentó a su mesa, y separando libros y papeles, dejó encima del pupitre un envoltorio que tenía debajo del brazo. Era una máquina de cargar cartuchos de fusil.

Palabra del Dia

rigoleto

Otros Mirando