Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 28 de junio de 2025
En el momento que encontré a aquel marinero estaban cerrando el puerto. Yo no conocía a nadie, y me alegré de relacionarme con alguien que pudiese darme una orientación. Le dije a mi nuevo conocido que no tenía plaza en ningún barco, que deseaba ir a América, y le enseñé mis certificados de buena conducta. El hombre me dijo: No se apure usted.
Se ha criado sola, en un solo cabo: con un padre que es más blando que una paloma, a pesar de tener la corteza algo dura, como buen catalán y marinero. Pero Momo no puede sufrir a Marisalada desde que dio en llamarle romo a causa de serlo.
Su cuerpo parecía el abuelo y las piernas los nietos, mientras que por sus zapatos tenía aire de navegar en seco ¡eran unos enormes zapatos de marinero que protestaban del gusano de pelo de su cabeza con la energía de un convento al lado de una Exposicion Universal!
En el segundo piso bullía, gritaba, coceaba y relinchaba toda la chusma del pueblo sin diferencia de clases, lo mismo el marinero de altura que el que pescaba muergos en la bahía o el peón de descarga; la señá Amalia la revendedora igual que las que acarreaban «el fresco» a la capital.
Entonces sí saltó de furor y gritó de desesperación... De este modo me apoderé de él. ¿Qué han resuelto ustedes? El plan más sencillo es siempre el mejor. Mañana le llevaré una blusa, un pantalón y una boina de marinero.
A las nueve de la noche hubo noticia, de que el marinero que faltaba lo tenian los indios en los toldos. A las tres de la tarde vino el marinero que faltaba, al cual lo habian apresado los indios en los toldos, y tenian ya como esclavo.
Contábase con terror en el pueblo, que había ahogado a un marinero por pasarlo tres veces debajo de la quilla, según prescribía la ordenanza para ciertas faltas; y a más de ciento había derrengado a palos o les había levantado el pellejo con el chicote.
El marinero, contentísimo del suceso, dió cuenta a los pescadores del navío que en el mar quedaba, diciéndoles que era de cosarios, de quien se temía que habían de venir por aquella doncella, que era una principal señora, hija de reyes; que para mover los corazones a su defensa le pareció ser necesario levantar este testimonio a mi hermana.
El marinero se metió sin detenerse en medio de las ruinas, arrostrando la muerte por buscar dinero, con el que encontró se fué á emborrachar; y después de haber dormido la borrachera, compró los favores de la ramera que topó primero, y que se dió á él entre las ruinas de los desplomados edificios, y en mitad de los moribundos y los cadáveres, puesto que Panglós le tiraba de la casaca, diciéndole: Amigo, eso no es bien hecho, que es pecar contra la razon universal, porque ahora no es ocasion de holgarse.
Habiendo resistido este impulso como completamente indigno del traje que vestía, encontró á un marinero borracho de la tripulación del buque del Mar de las Antillas de que hemos hablado; y esta vez, después de haber rechazado tan valerosamente todas las otras perversas tentaciones, el pobre Sr.
Palabra del Dia
Otros Mirando