Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 28 de junio de 2025


Era notorio que existía algún motivo poderoso para que él lo hubiera nombrado administrador de la fortuna de Mabel, y, sin embargo, todo aquello era un completo enigma, exactamente como el origen misterioso de donde el millonario había obtenido su enorme riqueza.

Hablándole con franqueza, le diré que me gusta considerarlo como si fuese mi hermano mayor declaró. Creo que nunca amaré a nadie añadió, pensativamente, mirando el brillante fuego de la chimenea. No, no; no diga eso, Mabel. Algún día encontrará a un hombre de su misma condición, lo amará, se casará con él y será feliz le observé, con mi mano apoyada en su hombro.

¡La Revolución! exclamó Mabel d'Ornay, simulando un temblor de espanto para acercarse al joven novelista. ¡Brrr! espero que ya no habrá jamás otra. ¿Acaso el pueblo necesita reivindicaciones? ¿No tiene todo lo que le hace falta?

, la señora Percival está en su gabinete privado. Hace cinco minutos que la dejó allí. Mabel, según parece, salió esta mañana a las once y aun no ha vuelto. ¡No ha vuelto! exclamé azorado. ¿Por qué? La señora Percival parece que está trastornada. Creo que abriga temores de que la haya sucedido alguna cosa.

Le prestamos dinero cuando su situación era precaria, le costeamos la educación de Mabel cuando él no tenía con qué pagarla y... Y él nos pagó hasta el último centavo... con intereses le interrumpí. Vamos; dejémonos de discutir aquí su proceder. El secreto se ha perdido para siempre: eso basta.

Y, sin embargo, cuando rememoraba bien toda la escena, parecía que Mabel estaba completa e irresistiblemente bajo el poder de ese hombre, a pesar que había intentado desafiarlo. Permanecimos con Hales y su esposa una hora más, aun cuando pocos datos nuevos obtuvimos, a excepción de algunas palabras que la anciana dejó escapar.

A la hora señalada me reuní con Mabel en Paddington, y dejando a un lado sus tristes meditaciones y desgracia, emprendimos el viaje hasta la estación Dunmore, más allá de Hereford.

Recuerda que puede haberlo hecho en beneficio de Mabel. ¡Ah! ¡por Job! murmuró mi amigo, no había pensado en eso. Si deseaba que fuera para ella, debe haber dejado su secreto en manos de alguna persona en quien confiara implícitamente. Sin embargo, él confiaba en nosotros... hasta cierto punto. Somos los únicos que tenemos algún conocimiento verdadero del estado de sus asuntos.

Hace una semana que vino y permaneció un par de horas. ¡Pero no es posible que siga abusando de usted de este modo! ¡Si no puedo seguir siendo su amante, puedo, sin embargo, ser siempre su campeón, Mabel! grité lleno de decisión. En adelante tendrá que arreglárselas conmigo. ¡Ah, no! tartamudeó, volviéndose hacia con recelo y temor. No debe usted hacer nada. De otra manera podría él...

Sus descubrimientos en Italia han venido a confirmar mis recelos. Pero usted va a seguir consejo, Mabel. Al principio, por lo menos, debe armarse de paciencia y sufrirlo insistí, cavilando, entretanto, si su odio se debería a que tal vez sabía que era el asesino de su padre. Su antipatía contra él era violenta, pero no pude descubrir qué razón tenía para ello.

Palabra del Dia

vorsado

Otros Mirando