Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 24 de mayo de 2025


Hijo, es preciso hacer algo por la vida: considera que es uno un pobre, con mujer, nueve hijos, dos suegras y tres cuñadas; dos suegras, señor, la madre y la abuela de mi mujer, y si uno no se da maña para mantener a este familión... La verdad es que a todos les di cordelejo: a D. Mauro, al papanatas de Juan de Dios, y a ti mismo, que ahora resucitas para pedirme a Inés. ¿Pero la amabas ?

Inés dijo presentándolas mutuamente: Esta es la señorita de quien hemos hablado, aquí tiene usted a doña Jesualda. A ver si se entienden ustedes. La Jesualda habitaba un cuarto tercero interior de una casa de la calle de Don Pedro; había sido prestamista, pero se le torcieron los negocios y tuvo que renunciar al comercio.

Si es eso lo que usted quería decirme... La justicia está ya encargada de esto y de devolver a Inés al jefe de la familia. Asunción alzó la vista y miró a su madre. Parecía deseosa de hablarle, pero con tanto miedo como deseo. Al fin, cobrando valor, se expresó de este modo con voz quejosa y tristísima, que producía en extraña sensación. Señora madre, ¿me permite usted que hable una palabra?

Y como don Alvaro ni por esas se desengañase y se atreviese un día a dar a la muchacha una palmadita en la cara, ella le dijo mirándole de arriba abajo con desprecio y enojo: Las manos quietas, señor don Alvaro. Conténtese usted con tocar el violón, y a no me toque. ¡Pues no faltaría más! ¿Será menester que me queje yo a doña Inés de la insolencia de usted?

Y él, lleno de sospechas y apesadumbrado de creerme liviana, siguió espiándome, y anteanoche, en la misma antesala de doña Inés, me sorprendió cuando don Andrés me abrazaba y me cubría de besos la cara y hasta la boca.

Para Ana el cuarto acto no ofrecía punto de comparación con los acontecimientos de su propia vida... ella aún no había llegado al cuarto acto. «¿Representaba aquello lo porvenir? ¿Sucumbiría ella como doña Inés, caería en los brazos de don Juan loca de amor? No lo esperaba; creía tener valor para no entregar jamás el cuerpo, aquel miserable cuerpo que era propiedad de don Víctor sin duda alguna.

La pobrecita estaba tan turbada que no acertó a contestar derechamente a lo que le dijiste. Indudablemente te conserva un noble y fraternal afecto; pero nada más. ¿No lo comprendiste? ¿No se ofreció a tus ojos o a tus oídos algún dato para conocer que ya Inés no te ama?

Se llamaba Inés, y había sido criada de doña Frasquita, de cuya casa salió para casarse con un ex cochero que, tras haber servido a un grande, con la protección de éste y sus propios ahorros, estableció un servicio de carruajes por abono.

Quien habló con él fue una mujer que entraba a verle con frecuencia y que le traía y llevaba recados de la señora doña Inés López de Roldan, sin duda para los negocios y obras de caridad que ellos trataban y hacían juntos. La interlocutora de don Andrés, ya comprenderá el lector que fue Serafina.

Pocos, sin embargo, según parece, lograron gran éxito en el teatro. Spanische Staatsgeschichte beschrieben von der Gräfin d'Aulnoy: Leipzig, 1703, S. 51 und 62. Hállanse en la colección de sus poemas: Poemas de la única poetisa americana Sor Juana Inés de la Cruz cuya tercera edición se publicó en Barcelona en 1691.

Palabra del Dia

commiserit

Otros Mirando