Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 11 de octubre de 2025


No bastaba ser federal ni llevar la cinta, que era preciso además que ostentase el retrato del ilustre restaurador sobre el corazón, en señal de amor intenso, y los letreros mueran los salvajes inmundos unitarios . ¿Creeríase que con esto estaba terminada la obra de envilecer a un pueblo culto y hacerle renunciar a toda dignidad personal? ¡Ah!, todavía no estaba bien disciplinado.

Otro de los monumentos de Bogotá, el más importante por su tamaño, es el Capitolio, o Palacio Federal. Fue empezado hace diez años, ha tragado ya cerca de un millón de pesos fuertes, y no sólo no está concluido, sino que creo no se concluirá jamás. El autor del plano debe haber tenido por ideal un dado gigantesco.

El viaje á Italia le hice desde Suiza. Salí de la capital federal en la diligencia de Lucerna, travesía corta y deliciosa que se verifica en once horas. Llegado á Lucerna me trasladé á Fluelen por el lago de los Cuatro Cantones. Nada mas poético, nada mas agradable que cruzar la distancia intermedia entre Lucerna y Fluelen: el tiempo que se emplea es el de dos horas y media.

El Facundo remueve en cada página la arcaica bandería de «unitarios» y «federales»; pero debo advertir al lector novel que no usa tales expresiones en su valor doctrinario, sino en su significado ocasional y argentino. «Federal», para un proscripto unitario de 1845, era sinónimo de gaucho localista y brutal; en tanto que «unitario», para un caudillo federal de nuestras provincias, era sinónimo de «loco» y «traidor». Unitario quería decir, además, porteño que había sido monarquista y visitado Europa, o vestía levita, gastaba lentes y era «doctor». No es ésta, como se ve, la doctrina de equilibrio político de las diversas regiones argentinas dentro de la nacionalidad, o sea el ideal que despuntó incipiente con Juan Ignacio de Gorriti en la Junta Grande de 1811, para triunfar con Alberdi y Mitre en la Constitución actual.

El gobierno de Balcarce había sucumbido en 1833, al empuje de este desbordamiento de la campaña sobre la ciudad. El partido de Rosas trabajaba con ardor para abrir un largo y despejado camino al Héroe del Desierto, que se aproximaba a recibir la ovación merecida: el Gobierno; pero el partido federal de la ciudad burla todavía sus esfuerzos si quiere hacer frente.

En suma, dudo que hubieran ustedes podido encontrar a otro igual a este tendero pagano entre los cristianos de su clase en San Francisco. Algunas personas más había allí. Un juez de la Audiencia Federal, un oficial superior del Gobierno, un rico comerciante y un editor.

Los negocios locales los dirije y resuelve el consejo de cada canton, cuyos individuos elige el pueblo: los asuntos generales de la confederacion están del mismo modo encomendados al pueblo: la asamblea federal, compuesta de los diputados de toda la nacion, elige el presidente y los ministros de la confederacion; y como los diputados son los genuinos representantes del pueblo, la gobernacion es siempre popular, como debiera serlo en todas partes.

Desde que las Cortes Constituyentes votaron la monarquía, Amparo y sus correligionarias andaban furiosas. Corría el tiempo, y las esperanzas de la Unión del Norte no se realizaban, ni se cumplían los pronósticos de los diarios. ¡Que hoy!... ¡que mañana!... ¡que nunca, por lo visto! ¡En vez de la suspirada federal, un rey, un tirano de fijo, y tal vez un extranjero!

En sus labios, la República federal no fue tan sólo la mejor forma de gobierno, época ideal de libertad, paz y fraternidad humana, sino período de vindicta, plazo señalado por la justicia del cielo, reivindicación largo tiempo esperada por el pueblo oprimido, vejado, trasquilado como mansa oveja.

Había que hacerla federal o matarla; era preciso proclamar los cantones. Y otra vez Fermín, con el fusil al hombro, batiéndose en Sevilla, en Cádiz y en la montaña por cosas que no entendía, pero que debían ser verdades tan claras como el sol, ya que Salvatierra las proclamaba. De esta segunda aventura salió peor librado.

Palabra del Dia

sueldos

Otros Mirando