United States or Tanzania ? Vote for the TOP Country of the Week !


Vais a saberlo; Margarita vivió dos largos años de inquietud. El conde, que mejoró un poco en su salud, recuperó un tanto la claridad de espíritu; pareció deplorar su casamiento, y su mujer le inspiró aversión. Ella tenía poca esperanza de que favoreciera en su testamento a aquella que le había inducido a contraer un matrimonio deshonroso.

Viendo el demonio que se le había desvanecido esta traza, se valió de otra, y fué introducir en el pueblo el pernicioso error de que lo mismo era echarles á los niños el agua del bautismo en la cabeza que despedirse del cuerpo sus almas; y se imprimió tan altamente este engaño en sus fantasías, que convirtiéndose el amor á los Padres en odio y aversión, los miraban con mal corazón y huían de ellos como enemigos jurados de su bien.

Su loco cuerdo es un verdadero caos de prodigios sin fundamento, que en vez de inspirar devoción, como su autor intenta, sólo excitan aversión y repugnancia. Cuenta la historia de un rico comerciante, que de repente se convence de la frivolidad de los bienes mundanos, y se retira al desierto para hacer rigurosa penitencia el resto de sus días.

A Magdalena nada más le decía una parte de la verdad. No le ocultaba nada de mi aversión a la sociedad, disparando tan sólo el motivo personalísimo de ciertos agravios. Cuando se trataba de juzgar al mundo de manera más general, aparte la perenne idea de que debía considerarlo como un ladrón de mi ventura, prodigaba las invectivas con feroz alegría.

Tiago que, desde que su hija se hizo monja, manifestaba cierta aversion á los frailes, en un momento de buen humor indújole á que se trasladase al Ateneo Municipal cuya fama estaba entonces en todo su auge. Un mundo nuevo se abrió á sus ojos, un sistema de enseñanza que él no se sospechaba en aquel colegio.

Acostose también ella, y estuvo dándole conversación hasta que le entró sueño. ¡Pobre chico! La lástima que Fortunata sentía, apagaba en su espíritu la aversión, o al menos la escondía, como en un repliegue, no permitiéndole manifestarse. Y la compasión hacía que brotaran en su voluntad aquellos deseos de virtud sublime que a ratos surgían como flor de un minuto, criada por la emulación.

Mientras duraron las salutaciones, D. Narciso, que estaba arrimado de espaldas al piano, no quitó los ojos de su compañero, unos ojos donde se leían claramente la aversión y el recelo. Sin que el P. Gil la provocara ni aun se diera bien cuenta de ella, existía viva rivalidad entre él y D. Narciso, a quien había arrancado más de la mitad de las hijas de confesión.

Llamaba ella á las piernas columnas del orden social, lo cual no era sino gallarda figura retórica, que cubría su mortal aversión á coser pantalones. Ella no cogia los puntos á los calcetines, porque, poco fuerte en toda clase de ortografías, siempre tenía en boca aquella sabia máxima: no se vive sólo de pan, apotegma con que quería disimular su absoluta ignorancia en materia de guisados.

Todas estas cosas iban fomentando en su alma entusiasta y ardiente, a par de un cariño fervoroso a las santas instituciones así perseguidas, profunda aversión a sus perseguidores y a los impíos que gobernaban contra la ley de Dios.

Llegó a parecerme que lo que me habían concedido había sido por pura merced y bondad, y que era natural privarme ahora de lo que no merecía. Hacia Gloria, dando por supuesto que me había engañado, no sentía rencor alguno. El malagueño seguía inspirándome aversión y repugnancia, pero no deseaba vengarme de él.