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D. Diego? dijo Santorcaz. Estoy entusiasmado replicó el mozuelo , y deseo que nos manden cargar sobre las filas francesas. ¡Y mi señora madre empeñada en que conservara yo aquella espada vieja sin filo ni punta...! ¿Está usía sereno? le preguntó Marijuán.

Ya sabrá que si no es por usía no se represa el Santa Ana, y sabrá también que puede ser que a lo mejor nos traiga a Cádiz dos docenas de navíos. Dos docenas, no, hombre dijo ; eso es mucho. Dos navíos, o quizás tres. En fin, yo creo que he hecho muy bien en venir a la escuadra. Ella estará furiosa y me volverá loco cuando regrese; pero... yo creo, lo repito, que he hecho muy bien en embarcarme».

Ni remotamente tenía yo derecho a imaginar que las caritativas visitas que usía me hizo, después de mi conversión, más aparente que real, le enlazaban conmigo, por ningún estilo, y le ponían en la obligación de consagrarse a mi persona con amistad exclusiva y única y de ser constante compañero mío en la penitencia, cuando nunca lo fue en el pecado.

»De aquí mi descompuesta furia y mi loca desesperación cuando usía, advertido a tiempo del peligro, dejó con razón de visitarme. Mi enojo fue mayor aún cuando supe que usía se había casado; enojo absurdo, porque usía ni me había prometido ni podía prometerme no casarse, para ser fiel a las relaciones indefinibles en que soñé yo que estábamos.

Y no permita el cielo que la paz del alma de usía se turbe y que se obscurezca su luz, al pensar usía en mi último pecado y en el único sin duda que usía cometió por mi causa e instigado por y por todos los espíritus del Averno que me auxiliaban entoncesAsí terminaba el escrito de la Caramba.

Aun así, no puedo menos de pensar en usía y de anhelar que usía me perdone. Yo he sido su ángel malo, y me arrepiento de ello y lo deploro. Compadézcame usía; pero no me llore, porque descansaré con la muerte.

Casi no nos tratamos con nadie, y si tememos que Francia nos tome por exaltadas patriotas, más nos duele que los vecinos nos crean afrancesadas. Quisiéramos estar bien con todos y que ni unos ni otros nos molestaran... Pero qué yo...; creo difícil... ¿Y en Madrid qué tal se vive? ¿Piensa Usía volver a la Corte?

En una casa que está en la acera del Norte entre la tienda de figuras de yeso y el establecimiento de burras de leche... allí. Entró Jacinta con el chaleco. Vamos... a ver... ¿Manda usía otra cosa? Nada más, hijita; muchas gracias. Dice este monstruo que no tuvo miedo y que se salió tan tranquilo... yo no lo creo.

María-Manuela quedó suspensa un instante, pero, revolviéndose colérica en seguida, exclamó: ¡Adiós, infanta! Perdone usía que le haya lastimao las orejas. ¿Quiere usía que hable por lo finitico? ¿Quiere usía un poquito de agua para quitarse el susto? Paca alzó los hombros con ademán de lástima. ¡Siempre has de tomar el rábano por las hojas, mujer!

Poca cosa dijo Tres Pesetas, que era el más atrevido. No más que abrirle un tragaluz en la barriga pa que salgan á misa las asaúras. Vamos, marchaos á vuestras casas dijo el militar con mucha entereza: yo le defiendo. ¿Usía? , yo. Marchaos, yo respondo de él. Pues sino ize ¡viva la...! ¡viva la Constitución! exclamaron todos á la vez, menos Calleja, que se estaba riendo como un idiota.