United States or Uruguay ? Vote for the TOP Country of the Week !


Montero recitaba sus famosos endecasílabos. La Flor de un día terminaba en medio de calurosos aplausos; la concurrencia evacuaba aquel antro que se llamaba teatro y en la puerta estallaban los vivas entusiastas y patrióticos del pueblo.

Que la baronesa, lejos de entregar la fortaleza, había organizado y dirigido la defensa con tantos bríos y acierto tal que al segundo día, después de empeñados y mortíferos asaltos, había perdido la vida Hugo, el jefe de los sitiadores, y huído y dispersádose éstos. La carta terminaba dando las mejores noticias sobre la salud de ambas damas é invocando sobre el barón las bendiciones del cielo.

Andando así a lo largo de un pasillo, llegamos a desembocar en otro que se cruzaba con él, y le seguimos hacia la derecha. Por este lado terminaba en un salón que me pareció más negro que los pasillos, porque en sus ámbitos desmesurados parecía la luz del farol la de una pajuela.

Aresti, llevando al lado á Goicochea en el mullido carruaje del millonario, pasó por varias calles de la Bilbao tradicional, admirando sus tiendas antiguas, adornadas lo mismo que en los tiempos de su niñez. Era igual el olor de zapatos nuevos y telas multicolores fuertemente teñidas. El carruaje comenzó á ascender penosamente por la áspera cuesta de Begoña. Terminaba el desfile de casas.

La fisonomía de la calle Perú y la de la Victoria, han cambiado mucho en los veintidós años transcurridos: el centro comenzaba en la calle de la Piedad y terminaba en la de Potosí, donde la vanguardia sur de las tiendas estaba representada por el establecimiento del señor Bolar, local de esquina, mostrador democrático al alba, cuando cocineras y patronas madrugadoras acudían al mercado, y burgués, si no aristocrático, entre las siete de la noche y el toque de ánimas.

La señora de Ponce estaba aún tranquila y confiada, y cuando Príncipe hizo correr su sillón desde la ventana hasta el fuego, le explicó que como el año escolar terminaba, probablemente retenían a Carolina sus lecciones, y que no podía dejar el colegio más que por la noche, una vez terminadas aquéllas.

Al cabo de unos quince días, su hermana le enseñó una carta que había recibido de ella; se daba por enterada del desamor de su novio, sin proferir una queja; disculpaba su conducta manifestando que después de la separación había reflexionado que ella no podía convenir a un hombre como Miguel; hubiera deseado, sin embargo, que éste se lo hubiera dicho antes de tenerla impaciente y triste muchos días; terminaba diciendo que al fin había conseguido de su tía el permiso para hacerse monja de la caridad.

Confieso que la especie, aunque singular, no me pareció tan extravagante, considerada filosóficamente. Entre relojes desarreglados, preferiré siempre los adelantados á los atrasados, porque, despues de todo, con los primeros se vive mas apriesa y se trabaja mas en la via del progreso. En Basilea terminaba nuestra rápida excursion en Suiza, que debíamos continuar por la region del bajo Rin.

Es esta calle muy corta, y formábanla en aquel tiempo, por la acera de la izquierda, la gran verja del jardín que rodea a un hotel de Recoletos, un solar lleno de escombros y la esquina de una casa de la calle de Serrano, en la cual se abría una puertecilla, al parecer condenada; a la derecha, extendíase primero la fachada lateral de cierto edificio público; seguía luego un hotel suntuoso, y terminaba la acera con otro solar en construcción y la esquina de otra casa de la calle de Serrano, en que no había puerta ninguna.

Ella, con su Chichí al lado, saludaba á las personas conocidas, cumplimentando luego á los novios. Otro día eran los funerales de un ex presidente de República ó cualquier otro personaje ultramarino que terminaba en París su existencia tormentosa. ¡Pobre presidente! ¡Pobre general!... Doña Luisa recordaba al muerto.