Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !


Ofrecióseles conciliar lo uno con lo otro disponiendo el decreto artificiosamente, de suerte que la corteza de la letra, á que habian de mirar los infieles, sonase á prohibicion de presentarse al martirio, pero que bien mirado el sentido, cual podian conocerle los prudentes cristianos, no incluyese ofensa de los mártires . Pero esta resolucion causó escándalo entre los cristianos ignorantes, desagradó á los mas ilustrados, y fué objeto de severas impugnaciones; causa tambien de reprobaciones y persecuciones nuevas.

Amigo lector: Permítame usted que le el mismo consejo con que ya favorecí al amigo de quien he hablado antes. Si alguna vez necesita usted que le operen, llame usted a un medicucho cualquiera. Llame usted a un sastre. Llame usted a un barbero o a un ebanista; pero no llame usted a un gran cirujano... Cuando se decretó en Madrid la vacuna obligatoria, todo el mundo se indignó.

¿Cómo, señor? preguntó el hombre en muy buen español; ¿hay algo nuevo? , se hará dentro de la semana que viene. ¡La semana que viene! repitió el desconocido retrocediendo: los arrabales no están preparados; esperan que el General retire el decreto... ¡yo creía que se dejaba para la entrada de la cuaresma! Simoun movió la cabeza.

Calilayan cuando lo visitamos dependía de Pitogo, hoy es pueblo, y en el superior decreto que mandaba su creación, se varió aquel nombre por el de Unisan.

En aquella tarde, cuando los establecimientos de crédito estaban ya cerrados, el gobierno había lanzado un decreto estableciendo la moratoria, para evitar una bancarrota general á consecuencia del pánico financiero. ¿Cuándo le pagarían?... Tal vez cuando terminase la guerra que aún no había empezado; tal vez nunca.

En los siglos XV y XVI se le honró, y muchos médicos disertaron larga y vivamente en pró y en contra de su uso. Fué condenado por un decreto de la facultad de Paris del 3 de agosto de 1566 y prohibido por un acuerdo del parlamento. Cincuenta años despues, la facultad escluia de su seno á uno de sus miembros, á Mr.

La batalla de Ayacucho inmortalizó el nombre del valiente hijo de Cumaná, tan buen patriota como virtuoso ciudadano, tan hábil como noble general. Al siguiente dia de esta batalla Bolívar entraba en Lima y expedia un decreto por el cual convocaba un Congreso para el 10 de Febrero del próximo año.

Inaugurábase el año 1811 con el bloqueo de las provincias venezolanas, bloqueo que Cortabarria mandaba ejecutar en cumplimiento de un decreto de la regencia, mientras que la junta, fiel á su convocatoria, llevaba á cabo la reunion del aplazado Congreso. Conforme á lo dispuesto por ella debia constar de cuarenta y cuatro diputados.

La noche de Al-Kadar, ó noche del Decreto de Dios, es aquella en que Mahoma supuso haber recibido el Koran. Tomando consigo unos cuantos de sus fieles adeptos, se retiró una noche el Profeta al monte Hera: no bien llegó al medio de la montaña, apareciósele Gabriel.

Ambos nos hallábamos profundamente conmovidos. Me senté para escribir el decreto que debía de entregarle, y dije: Apenas puedo escribir; la herida del dedo me impide todavía moverlo. Era aquella la primera vez que me arriesgaba a escribir, a excepción de mi nombre y a pesar de los esfuerzos que había hecho para imitar la letra del Rey, distaba mucho de la perfección.