Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 13 de mayo de 2025


Lucifer y la Culpa gimen en mortal agonía, y la Naturaleza humana se prosterna de rodillas, adorando al Santísimo. La cena de Baltasar, de Daniel, 5, 5. Este auto, de admirable profundidad, y calculado, no obstante, por su estructura externa para hacer efecto teatral, comienza por un diálogo entre Daniel, que personifica la justicia de Dios, y el Pensamiento, bufón y gracioso.

Lo mismo en casa de Anguita que cuando nos tropezábamos en la calle, charlábamos como buenos y antiguos amigos; tanto, que una vez, que confidencialmente reíamos en un rincón, exclamó Pepita, al cruzar por nuestro lado: ¡Tiene grasia! Hase poco querían ustedes matarse, y ahora... Y ahora noz estamo dando la lengua, ¿verdá, prenda? replicó Daniel con su inveterado cinismo.

Baltasar intenta derribar en tierra con su espada al atrevido profeta; pero nada logra contra el ungido del Señor, alejándose desalentado y afligido. Daniel prorrumpe en estas palabras: ¿Quién sufrirá tus inmensas Injurias, Autor del día?

26 Y se sentará el Juez, y le quitarán su señorío, para destruir y para echar a perder hasta el fin; 28 Hasta aquí fue el fin de la palabra. Yo Daniel, mucho me turbaron mis pensamientos, y mi rostro se me mudó; mas la palabra la guardé en mi corazón. 1 En el año tercero del reinado del rey Belsasar, me apareció una visión a , Daniel, después de aquella que me había aparecido antes.

Id 1431 Alfon Garcia Jardín, T. de reposteros 1442 Juan González Beniste y Manuel López, Ts. de oro y de sirgo 1450-53 Miguel de la Cueva y Diego Fernández Ts. de terciopelo 1475-79 Anton de Alanís y Daniel Sánchez, Ts. de oro y seda 1478 Siglo XVI

Todos los grandes artistas de teatro han reconocido la importancia del maquillaje, cuya invención se atribuye á Daniel Bac, famoso actor bufo de en tiempos del segundo imperio.

Di otros tres o cuatro, y vi que aquel hombre era, sin género de duda, Daniel Suárez. Es horrible decirlo, pero lo diré, porque quiero que este libro sea una confesión. Si me hubiesen dicho en aquel momento: «Se ha muerto tu padre», no hubiera recibido impresión más cruel. Miraba y no quería creer a mis ojos. Estaba a unos veinte pasos de distancia.

17 Entonces Daniel respondió, y dijo delante del rey: Tus dones sean para ti, y tus presentes dalos a otro. La escritura yo la leeré al rey, y le mostraré la declaración. 18 El Altísimo Dios, oh rey, dio a Nabucodonosor tu padre el reino, y la grandeza, y la gloria, y la hermosura. 19 y por la grandeza que le dio, todos los pueblos, naciones, y lenguas, temblaban y temían delante de él.

10 Y Daniel, cuando supo que la escritura estaba firmada, entró en su casa, y abiertas las ventanas de su cenadero que estaban hacia Jerusalén, se arrodillaba tres veces al día, y oraba, y confesaba delante de su Dios, como lo solía hacer antes. 11 Entonces se juntaron aquellos hombres, y hallaron a Daniel orando y rogando delante de su Dios.

A su vista aparecen, y van pasando, Elias, Ezequiel, Daniel, Isaías, Amos y los demás profetas, así como los reyes, jueces y príncipes: Melquisedec, David, Moisés, Salomón, y qué yo cuántos más. Todos llevan el rostro inmóvil de la carátula, y en las potencias, aureola o nimbo que coronan sus cabezas, inscrito el nombre de cada uno.

Palabra del Dia

commiserit

Otros Mirando