United States or Bangladesh ? Vote for the TOP Country of the Week !


Lo mismo en casa de Anguita que cuando nos tropezábamos en la calle, charlábamos como buenos y antiguos amigos; tanto, que una vez, que confidencialmente reíamos en un rincón, exclamó Pepita, al cruzar por nuestro lado: ¡Tiene grasia! Hase poco querían ustedes matarse, y ahora... Y ahora noz estamo dando la lengua, ¿verdá, prenda? replicó Daniel con su inveterado cinismo.

Amparo que solía empujar a Chinto, y no por vía de halago, bien lo sabe Dios, sino de pura rabia que le tuvo siempre. Si pudiese leer en el alma del paisano, adivinar cómo le hervía la sangre al acercarse a ella, le hubiera cobrado asco amén del odio inveterado ya. Para Amparo, hija de las calles de Marineda, ciudadana hasta la médula de los huesos, Chinto era un ilota.

Claro está que los negros y mulatos de la clase más ruda y humilde que hay en Cuba entre los rebeldes, están allí por merodear; que los aventureros de países extraños están para ganar importancia y dinero en la contienda; y que algunos ambiciosos, nacidos en la propia tierra, están porque sueñan con ser ministros ó presidentes de la República futura; pero si hay cubanos de arraigo y buena que conspiren ó luchen contra España y anhelen la independencia de Cuba, esa desconfianza secular, ese vicio inveterado del separatismo, es quien los mueve.

El débil P. Prior de Nuestra Señora del Valle, que no se atrevió á cortar con mano firme el inveterado abuso de que fue campeón el P. Procopio, resignó su cargo á causa de sus muchos años, y se retiró á pasar tranquilo en otro convento los que le quedasen de vida. Claro está que alguien había de sustituirle para que la comunidad no quedase convertida en un cuerpo acéfalo y disparatado.

Contra un achaque tan inveterado no qué remedio pueda haber. El arte de producir oro, la Crisopeya, se ha perdido por completo, y ya no tenemos más arte o ciencia en que cifrar nuestras esperanzas, a ver si nos saca del atolladero, que la Economía Política. Dios ponga tiento en las manos de los que la saben y la aplican a la gestión de los negocios del Estado.

Vegallana empezaba siempre con sus sardinas; devoraba unas cuantas docenas, y en seguida se levantaba, y discretamente desaparecía del comedor. Siguiendo uso inveterado todos hicieron como que no notaban la ausencia del Marqués; y en tanto llegó y se sirvió la sopa. Cuando el amo de la casa volvió a su asiento, estaba un poco pálido y sudaba.

La hermosura varonil del torero puede y debe ejercer influencia benéfica en el ánimo de la muchedumbre, en quien un inveterado espiritualismo ascético y después otras varias causas han hecho que se descuiden por demás en España el esmero y cuidado del cuerpo. Nuestra clase media le atiende y le ejercita poco.

El señorito de Limioso, tradicionalista inveterado, como su padre y abuelo, había hecho dos o tres misteriosas excursiones hacia la parte del Miño, cruzando la frontera de Portugal, y susurrábase que celebraba entrevistas en Tuy con ciertos pájaros; afirmábase también que las señoritas de Molende estaban ocupadísimas construyendo cartucheras y no qué más arreos bélicos, y a cada paso recibían secretos avisos de que se iba a practicar un registro en su casa.

El recogimiento en la reflexión, el asiduo examen interior, el inveterado instinto y la obstinada necesidad de mirar dentro de mismo, lo habían envenenado. ¿Vuelve jamás la gota de agua a parecer líquida perla después de que el ojo armado de una lente ha visto dentro de ella un mundo horrible?

De esta suerte, encontró doña Luz un poderoso aliado para sus perpetuas disputas con el médico, cuyo inveterado positivismo no cedía jamás ni daba lugar a una conversión, pero cuyo concepto del saber, de la elevada inteligencia y de la bondad del Padre, era mayor cada día.