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Actualizado: 8 de septiembre de 2025


Pidió, pues, con instancia á D. Felipe la asistencia contra los infieles, enviando por embajador á la corte al Comendador Guimarán.

»Por una vela de cera, cuatro reales de vellón. »Por asistencia, dos ducados. »Por derechos de carcelaje, ocho ducados. »Todo lo cual monta la suma de cuarenta y siete ducados y cuatro reales de vellón. Ginés PiedrahitaDebemos advertir, que de esta cuenta sólo leyó don Juan la suma total. ¿Traes contigo dinero, Clara? dijo don Juan. , por acaso; ¿qué se necesita?

En tanto que esto pasaba, viendo Sancho que podía hablar a su amo sin la continua asistencia del cura y el barbero, que tenía por sospechosos, se llegó a la jaula donde iba su amo, y le dijo: -Señor, para descargo de mi conciencia, le quiero decir lo que pasa cerca de su encantamento; y es que aquestos dos que vienen aquí cubiertos los rostros son el cura de nuestro lugar y el barbero; y imagino han dado esta traza de llevalle desta manera, de pura envidia que tienen como vuestra merced se les adelanta en hacer famosos hechos.

Golpeó fuertemente el tabique inmediato a su cama. En la habitación próxima dormía Salvador; y durante los días críticos de la enfermedad de D. Benigno, siempre que este necesitaba de la asistencia de su nuevo amigo le llamaba con un par de golpes suavemente dados en la pared. Era la media noche.

Las estancias de los enfermos, cierto tiempo salian al estado á razon de 28 á 30 rs. vn. por estancia: á la vista de Manila se halla el hospital de Cavite, en donde los enfermos no gozan menos que en Manila de aseo, buena asistencia y mejor trato; pero por contrata solo le cuesta al estado cada estancia dos tercios menos que las otras; es decir, 10 rs. vn.: ¿por que esta notable diferencia?

No es otra cosa que un testimonio claro de la imperfección de nuestra existencia planetaria y del amor al ideal que todo hombre lleva dentro de sin verlo jamás realizado. Después de habernos así mostrado filósofos y optimistas, prosigamos nuestra narración. Llegó el día del matrimonio. Efectuóse de madrugada dentro de la misma casa de Belinchón, con asistencia de algunos parientes y amigos.

Llegada la hora de rezar el rosario, acto solemne que se verificaba en el comedor con asistencia de todos los de la casa, mi amo, que otras veces solía dormirse, murmurando perezosamente los Pater-noster, lo cual le valía algunas reprimendas, estuvo aquella noche muy despabilado y rezó con verdadero empeño, haciendo que su voz se oyera entre todas las demás.

Tome usted 20 francos, y pague usted otros quince dias al amo de la fonda, para que la trate con cariño, ya que con dinero hay que ganar cariño en un pueblo que se llama cristiano. Tome usted otros 20 francos y déselos usted á la enferma, ó reténgalos usted misma, á fin de que Luisa tenga la asistencia que su estado reclama.

Como ampliación de este punto, insertaremos algunos párrafos de antiguos viajes, en los cuales se habla de la asistencia de sus autores á diversos teatros de España.

A semejanza de estudiante calavera que está en su casa lo menos que puede, ella iba a la suya a las horas en que Pepe trabajaba, temerosa de tropezar con él, y cada cuatro o seis días se quedaba una noche a dormir en la hermandad. Leocadia se hizo cargo de la asistencia del padre, pero de mala gana, sin renunciar a las visitas a la sala de ventas ni dejar de frecuentar la capilla.

Palabra del Dia

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