Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 19 de junio de 2025


Porque estas puertas se cierran para nosotros apenas asome Don Juan Manuel. Lo mejor es el arca de la criada, y nadie sospechará.... Mientras habla el primogénito, el tonsurado vuelve a subir las gradas del presbiterio y apaga la lámpara, que por fundación debe arder noche y día.

¡Oh! , seguramente, dijo uno de los que le escuchaban; quisiéramos que fuese de carne y hueso. ¡Carne y hueso!... ¡Miseria, podredumbre!... exclamó el capitán. Yo he sentido en una orgía arder mis labios y mi cabeza; yo he sentido este fuego que corre por las venas hirviente como la lava de un volcán, cuyos vapores caliginosos turban y trastornan el cerebro y hacen ver visiones extrañas.

En torno del salón no había cundido el incendio porque eran los muros de sólida mampostería, revestida de mármoles, que sin arder se calcinaban; pero lo interior del salón parecía un infierno: medroso torbellino de humo y de llamas. Inevitable era pasar por allí. Tiburcio dio el ejemplo. Se diría que a su paso se apartaban las llamas y el humo como si le conociesen y respetasen.

Diciendo esto, cogió una tea, y pegó fuego á la casa. Asustado Zadig dió gritos, y le quiso estorbar que cometiese accion tan horrenda; pero se le llevaba tras con superior fuerza el ermitaño. Ardia la casa, y el ermitaño que junto con su compañero ya estaba desviado, la miraba arder con mucho sosiego.

Fué, pues, el caso, que un cristiano de la misma nación, habiendo apostatado de la y religión cristiana, murió, por justos juicios de Dios, pertinaz en su apostasía. Este, por permisión divina, se apareció, á pesar del infierno, á muchos Chiriguanás, diciéndoles cómo por haber desamparado la religión cristiana, estaba condenado á arder en llamas eternas.

La vi enternecerse; los ojos se le arrasaron de lágrimas, y exclamó, queriendo reprimir los sollozos con un esfuerzo: A mi madre la quiero con toda mi alma, y la perdono... Está embaucada... Si no lo estuviera, no haría conmigo lo que ha hecho... ¡Pero a ese tío brujo, que ha de arder en los infiernos, nadie le corta el pescuezo más que yo!

Es de noche y veo que en la cima de una montaña se enciende un fuego; á poco rato de arder, noto que en la montaña opuesta asoma una luz; brilla por breve tiempo y desaparece. Esta ha salido despues de encendido el fuego en la parte opuesta; pero de aquí no puedo inferir que haya entre los dos hechos relacion alguna.

Esto es por lo menos lo que contaban los criados, quienes, en tres ocasiones, lo habían encontrado por la mañana en esa actitud. En torno del ataúd de Olga los cirios habían concluido de arder. Los invitados, que hacía largo rato se mantenían en religioso silencio alrededor del catafalco, comenzaban a agitarse y a preocuparse de la cena.

El desquite de los pobres estaba próximo, y la ciudad blanca y risueña, la ciudad de los ricos, con sus bodegas y sus millones, iba a arder, iluminando la noche con el esplendor de su ruina. Se agrupaban los recién llegados a un lado del comino, en la llanura cubierta de matorrales.

Cuando la orquesta se calló, llevó a su pareja hacia un ángulo de la sala, y allí departieron un momento de pie. Pablito sintió arder entre las cenizas de su amor una chispa de simpatía por aquella muchacha tan alegre, tan apacible, tan cariñosa. Ya tenía deseos de bailar contigo, Nieves le dijo mientras se limpiaba el sudor con el pañuelo. Y yo con usted, Pablo. ¿Usted? La joven se ruborizó.

Palabra del Dia

metropolitanos

Otros Mirando