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Yo, para no perder ningún pormenor de esta última etapa del combate, puse mi caballo al galope y corrí con los rurales, que al grito de ¡Al machete! barrían á los últimos alzados.
Cuando, á raíz del incendio de Ramón de las Yaguas, las partidas rebeldes emprendieron la retirada hacia Mayarí Arriba, el General Monteagudo, en vez de lanzar en seguimiento de los alzados grandes contingentes de tropas, se limitó á situar fuerzas en los mismos parajes que el enemigo acababa de visitar.
Es consolador, ensancha el corazón y levanta el ánimo el aspecto marcial y la resolución que se advierte en todos los pasajeros. No hay uno entre ellos, que no desee tropezarse con los alzados, "esos canallas, miserables, traidores, que no pagan ni fritos lo que están haciendo". Lo malo es que aquella actitud y este lenguaje solo prevalecen hasta que llega el tren á Camagüey.
En toda la noche no cerró Loppi los ojos, pensando en el amanecer, y en los puños alzados de Masicas, que le parecieron un ganso cada uno. Y a paso de moribundo se fue arrimando al charco a los claros del día. Y las voces que daba parecían hilos, por lo tristes, por lo delgadas: /P «Camaroncito duro, Sácame del apuro.» P/ ¿Qué quiere el leñador? Para mí, nada: ¿qué he de querer yo?
Palacio de la Presidencia, en la Habana, 3 de Junio de 1912. He aquí una copia fiel de algunos de los más curiosos documentos ocupados á los alzados, por las tropas del gobierno: Ejército Reivindicador Cuartel General en Campaña en el punto la Cristina. He recibido del Cdno.
Los alzados, que no esperaban sin duda el aguacero de proyectiles explosivos que caía sobre ellos, trataron de correrse á otra posición situada algo á retaguardia de la que en un principio ocupaban; pero allí también les alcanzaron el shrapnell y la metralla; y yo, que no perdí el menor detalle de la acción, puedo afirmar que la artillería cubana es irresistible, que la fijeza de sus disparos es asombrosa, y que los oficiales americanos que sirvieron de instructores á nuestros artilleros pueden sentirse orgullosos de sus discípulos.
Poco más de dos minutos, que nunca olvidarán los mortales que han presenciado esta gran tragedia, duró el eclipse total. El pueblo seguía aclamando á Dios, con los brazos alzados al cielo, con las lágrimas en los ojos.....
Y yo veo a este señor de pie, con los ojos alzados, con los brazos extendidos, con la cabeza enhiesta. En este momento el sombrero de jipijapa rueda por el suelo; yo me acerco pasito, lo cojo y lo tengo con las dos manos en tanto que oigo los versos con la boca abierta.
Pero a la semana justa, en cuanto vio en la mesa el tocino y la sopa, se puso colorada de la ira, y le dijo a Loppi con los puños alzados: ¿Hasta cuándo me has de atormentar, mal marido, mal compañero, mal hombre? ¿que una mujer como yo ha de vivir con caldo y manteca? Pero ¿qué quieres, amor mío, qué quieres? Pues quiero una buena comida, mal marido: un ganso asado, y unos pasteles para postres.
Esto no obedecía á otra cosa que al hecho de que la zona que el tren atravesaba era la más frecuentada por las partidas rebeldes, dándose el caso repetidas veces de que los alzados plantaran su bandera sobre las lomas en las cercanías de las paralelas del ferrocarril.
Palabra del Dia
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