Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 15 de junio de 2025


¡Plaza, pues! plaza a la monja que entra en su palco toda adornada y cubierta de tela blanca sembrada de flores. ¡Bravo! los clarines suenan, es la señal, y las puertas del toril se abren; ¡un toro se precipita a la arena! Es un bravo toro salvaje nacido en las selvas de Sanlúcar; es pardo de color; solamente una estrecha faja blanca serpentea por su lomo.

Los pasos suenan en las galerías como en un claustro inmenso, los gritos se confunden y la alta montera de cristales parece palpitar con el zumbido de las hormigas humanas que abajo se agitan día y noche. Allí está el mercado de los artistas; la lonja de la música, el banderín reclutador de voces.

Veía los puertos egipcios, con su corrupción tradicional que empieza á removerse y croquear como un pantano fétido apenas desciende el sol; Alejandría, en cuyos cafetuchos bailan las falsas almeas sin más ropas que un pañuelo en la mano, y cada mujer es de una nación diferente, y suenan á coro todos los idiomas de la tierra...

Inmediatamente se escuchan unos pasos; suenan cerrojos y cadenas; se abre la puerta y aparece el capitán envuelto en una bata que había sido verde esmeralda, luego fué verde malva y ahora era gris plomo. En los pies babuchas y en la cabeza un gorro de terciopelo negro con borla de seda. ¿Qué te ocurre, hija mía?

Mire a esas gentes que tenemos a nuestros pies. Van en busca del dinero de un extremo a otro del globo. ¿Y cree usted que no sueñan? ¿Se imagina usted que en su peregrinación hacia el pan no hay mucho de ilusión, de idealismo?... Ojeda movió la cabeza afirmativamente.

»Pues cate usted ahí, que de repente, y sin que nadie se lo mandase, suenan a la par más de mil instrumentos, trompetas, pitos y unos violines tamaños como confesonarios, que se tocaban para abajo. ¡María Santísima, y qué atolondro!, yo di una encogida que fue floja en gracia de Dios. Pero ¿de dónde salió tanto músico? preguntó su madre. ¿Qué yo?, habría leva de ciegos por toda España.

Cuando, una hora más tarde, suenan los primeros acordes, la joven exclama con un estremecimiento de alegría: ¡Ahora soy tuya, Juan! Martín le recomienda que tenga cuidado con el frío para no caer enferma; pero antes que haya concluido de hablar, los jóvenes han desaparecido. Entonces se resigna, toma un buen vaso de vino de Hungría y se echa sobre el sofá para descansar.

Las obras más celebradas hoy á me suenan á hueco y no veo en ellas otra cosa que una forma bella guardando un pensamiento muy frívolo. Mientras los hombres de ciencia no se apoderen del teatro, no pasará éste de ser un fútil y agradable entretenimiento. Nada más por hoy. He estudiado todo el día y tengo la cabeza como un horno. Vegalora 3 de Octubre de 187... El cáliz.

Aun suenan en mis oídos sus consejos y aun podría repetir sin equivocarme la multitud de oraciones que me hacía decir de rodillas sobre la cama a la hora de acostarme... Esto no se puede olvidar, María..., ¡sería un infame si lo olvidase!... Hoy los mismos consejos vuelven a salir de unos labios idolatrados... ¿Cómo quieres que no sea para dulce la religión viniendo siempre predicada por los seres a quienes más he querido y respetado en mi vida?... , hermosa mía, soy religioso por nacimiento y por convicción, y espero serlo aún más fervoroso con tu ayuda.

Pero de todos los grandes irónicos que hoy florecen en España, estoy convencido de que es usted el que ofrece mayor solidez. ¿Quiere usted decir con eso que los demás suenan a hueco? preguntó el sabio con fina sonrisa maliciosa. Cabalmente y que el hombre verdaderamente macizo que conozco es usted.

Palabra del Dia

irrascible

Otros Mirando