Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 25 de julio de 2025
Como les está prohibido á los indios de todas las misiones de Moxos el ir armados, desde la rebelion que tuvo lugar en San-Pedro, la caza abunda en todos estos parages, aumentándose mas y mas no siendo perseguida. Los monos se presentan á cada paso divirtiendo á los viageros con sus muecas y brincos: hay tambien allí una especie de monos nocturnos.
Y torpemente, acompañando sus expresiones con muecas y arañazos en las perneras del pantalón, fué explicándose, aunque entre palabra y palabra transcurrían á veces dos minutos. Se alegraba de verla buena... (Sonrisa de Roseta y un «grasies» murmurado tenuemente.) ¿Se había divertido mucho el domingo?... (Silencio.)
Y no se puede afirmar cuales están mejor pintados, porque si los del último período son un prodigio para quien conoce la técnica, los anteriores asombran por la vida que hay en sus cuerpos, prontos a moverse, y en sus rostros donde tras gestos o muecas de un cómico insuperable, parece que bulle la tristeza sin nombre que debe de dejar en el alma el convencimiento de la propia ignominia.
Atravesaba por una de esas situaciones en que el individuo más manso siente violentos deseos de estrangular a alguien y de romper cualquier cosa. Los nervios que no se pueden calmar con lágrimas, tienen que estallar de cualquier modo y a mi me dio con mis hombrecillos de terracota cuyas muecas y sonrisas me parecieron de pronto odiosas y ridículas.
Tenía el cuerpo esbelto, las manos ásperas del trabajo y el agua fría, la cara diablesca, con unos ojos reventones de que sacaba mucho partido para hacer reír a la gente, la boca hocicuda y graciosa, con un juego de labios y unos dientes blanquísimos que eran como de encargo para producir las muecas más extravagantes.
La pregunta, aunque inocente, causa honda perturbación en el espíritu del capellán, a juzgar por la serie de muecas y ademanes descompuestos a que se entrega antes de pronunciar una palabra. ¿Quién? ¿Yo?... ¡Parece mentira que un amigo y un compañero me diga cosa semejante! Y dió la vuelta muy conmovido y se llevó el pañuelo a los ojos, de donde brotaban algunas lágrimas.
Finalmente, el sexo débil de las galerías superiores se unió al estornudo general, cubriéndose con los velos para ocultar las muecas á que le obligaba este gesto. Durante mucho tiempo sólo se oyeron estornudos. Hasta el infatigable Gurdilo, que intentó aprovecharse de una ocasión tan propicia para protestar contra el gobierno, no pudo conseguir su propósito.
Muchas veces estaba de rodillas pidiendo perdón a la comunidad y se reía a carcajadas, o entraba en las clases a besar el suelo y con sus muecas armaba un belén en todas ellas. ¡Las veces que habrá adelantado el reloj para que llegase primero el momento de recreo! No se podía estar tranquila teniéndola a ella en la clase.
Nicolasa, con suma blandura, enjugó las lágrimas del mozo con el propio pañuelo de ella; luego le dió tres ó cuatro palmaditas en el grueso y robusto cogote; luego le hizo unas cuantas muecas como remedando la desconsolada cara que ponía, y, por último, le pegó un afectuoso y archi-familiar tirón de las narices. Tomasuelo no supo resistir á tanto favor y regalo.
Al ver aquello, el vizconde se sonrió con malicia mirando a Juan Maury; éste se puso rojo como la grana, y Rafaela, sin poder reprimirse, empezó a reír a carcajadas. Don Joaquín hubo de imaginar que a Rafaela le hacían mucha gracia las muecas de aquel muñeco, y le movió más, poniéndosele delante.
Palabra del Dia
Otros Mirando