Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 23 de junio de 2025


¡Tiene un traje de luces nuevo, que se lo ha hecho el mejor sastre, el que viste a Gallardo y a otros matadores! Siete mil reales me cuesta. ¡Me parece que con esto cualquiera se luce!... Me tiene además a , que soy capaz de gastarme hasta la última peseta para que haga carrera. ¡Si muchos tuviesen un padre como yo!...

En cambio, los enemigos y la gran masa del público, que desea peligros y muertes, ¡qué injustos en sus apreciaciones! ¡qué audaces para insultarle!... Lo que toleraban a otros matadores, estaba vedado para él. Le habían visto audaz, lanzándose ciegamente en el peligro, y así le querían para siempre, hasta que la muerte cortase su carrera.

Los devotos de otros matadores, serenos ya y libres del arrebato que los había arrastrado a todos, rectificaban su espontáneo movimiento, discutiendo a Gallardo. Muy valiente, muy atrevido, un suicida; pero aquello no era arte.

Ambos, después de su muerte, se aparecieron vestidos de los ornamentos sagrados y cercados de mucha luz á sus bárbaros matadores reprendiéndolos su maldad y exhortándoles á que trajesen á su tierra nuevos Jesuitas que los instruyesen en la fe de Cristo.

Debo decir desde luego que, desde el momento que pisé estas tierras queridas del sol, el África suena en mis oídos a todo momento, sea en las quejas da Selica al pie de los árboles matadores, sea en sus cantos adormecedores, sea en el cuadro opulento de aquel indostán sagrado donde el sol abrillanta la tierra. Es un hecho positivo que el manzanillo tiene propiedades fatales para el hombre.

Y álcense estos manteles, y denme a de comer, que yo me avendré con cuantas espías y matadores y encantadores vinieren sobre y sobre mi ínsula. En esto entró un paje, y dijo: -Aquí está un labrador negociante que quiere hablar a Vuestra Señoría en un negocio, según él dice, de mucha importancia.

Estos escaparon también, como si las palabras del jayán les hubiesen devuelto la razón. Montenegro, al verse solo frente al cadáver, tuvo miedo. Comenzaban a crujir algunas ventanas después de la fuga precipitada de los matadores y huyó, temiendo que le sorprendiesen los vecinos junto al muerto. No se detuvo en su fuga hasta llegar a las calles grandes.

28 Por esto la tierra será asolada, y los cielos arriba se oscurecerán, porque hablé, pensé, y no me arrepentí, ni me tornaré de ello. 30 Y , destruida, ¿qué harás? Aunque te vistas de grana, aunque te adornes con atavíos de oro, aunque pintes con antimonio tus ojos, en vano te engalanas; te menospreciarán los amadores, buscarán tu vida. Que mi alma desmaya a causa de los matadores.

Había dicho «¡Fuera todo el mundoIba a hacer una de las suyas. Pero ni llegó lo que el público esperaba, ni el Nacional dejó de marchar tras él, capote al brazo, adivinando con su astucia de antiguo peón habituado a las marrullerías de los matadores la falsedad teatral de esta orden.

Hubo una exclamación de protesta. ¡Banderillear él!... Todos conocían su flojedad en tal suerte. Esta quedaba para los que habían hecho su carrera paso a paso, para los que habían sido banderilleros muchos años al lado de sus maestros antes de llegar a matadores; y Gallardo había comenzado por el final, matando toros desde que salió a la plaza. ¡No! ¡no! clamaba la muchedumbre.

Palabra del Dia

ayudantes

Otros Mirando