Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 16 de julio de 2025


Cuando se hubiera casado esa señora con algún paje suyo, o con otro criado de su casa, como han hecho otras muchas, según he oído decir, fuera el daño sin remedio; pero el haberse casado con un caballero tan gentilhombre y tan entendido como aquí nos le han pintado, en verdad en verdad que, aunque fue necedad, no fue tan grande como se piensa; porque, según las reglas de mi señor, que está presente y no me dejará mentir, así como se hacen de los hombres letrados los obispos, se pueden hacer de los caballeros, y más si son andantes, los reyes y los emperadores.

Pues bien, debo decir que estoy profundamente cansada y herida de todo esto; se lo aseguro. Y cuando en este momento acaba de ofrecerme en prenda, su honor de gentilhombre, que le ha permitido hacer tantas cosas indignas, tengo sin duda el derecho de no creer en él, y no creo.

A fe de gentilhombre que si alguien muriese aquí no se encontraría con qué enterrarle. ¡Tanto peor! ¡tanto peor! ¡nobleza obliga! El duque de La Tour de Embleuse no es un ama seca, ¡y sobre todo del hijo de la señora Chermidy! Antes me dejaría morir en un jergón. Doctor, estoy muy contento de que me haya puesto a prueba y no le guardo ningún resentimiento.

Aquella era la puerta por donde debía salir Alonso del Camino, y por la que salió descolgándose por el balcón á la huerta del convento. Apenas había cerrado el balcón el padre Aliaga, cuando se abrió la puerta de la celda, y apareció la cabeza del hermano Pedro. Un gentilhombre que viene de palacio dijo , quiere hablar con vuestra paternidad.

¡Inquisidor general! No si debo alegrarme ó entristecerme. Allá veremos. Entre tanto, y mientras yo estoy fuera del convento, quedáos á la mira. Descuidad. En vos confío. Id, id con Dios y nada temáis. Salió de nuevo el padre Aliaga, atravesó el claustro seguido del gentilhombre, salió del convento, entró en una litera, y aquella litera rodeada de soldados, tomó el camino de palacio.

El maestresala, vestido como un gentilhombre flamenco, comandaba a la servidumbre con signos casi imperceptibles. Al anochecer, de vuelta a sus casas, las visitas desfilaban entre doble hilera de lacayos apostados a lo largo de los pasadizos, hasta la puerta de la calle, cada cual con un hacha de cera encendida. Gastábase tanta luminaria como en la Iglesia Mayor. Todo era fastuoso y señoril.

Mañana se anuncia, al fin, el casamiento de mi primera hija, con un gentilhombre del Franco Condado, que se llama M. de Cessia. Cecilia es muy bella y más joven que él. A pesar de la diferencia de edad, él es muy bueno y razonable. A los dieciséis años recibió una herida formando parte del ejército de Condé, y cojea un poco.

¡Ah! ¡perdone vuecencia! ¿qué desea vuecencia? ¿Habéis avisado al rey de mi llegada? ; , señor: en el momento en que llegó vuecencia. ¿Dónde está el rey? En su recámara. ¿Con quién? Con el duque de Uceda. ¡Con mi hijo! , señor. Gracias, caballero, gracias. El gentilhombre salió.

El señor Felipe de San Vicente, individuo del Consejo de las órdenes, Comisario de la Santa Inquisición y antiguo gentilhombre del Rey, recibió cordialmente al canónigo, tomándole una y otra mano en las suyas.

Tenía el autor entonces treinta y seis años; estaba en toda la plenitud de su actividad mental y en todo el hervor de su juventud, y de allí tal vez el cariño con que ha trazado la figura de Máximo Odiot, ese perfecto gentilhombre, cautivador en su brillante pobreza.

Palabra del Dia

buque

Otros Mirando