Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 23 de junio de 2025
Las que el soldado muestra en el rostro y en los pechos, estrellas son que guían a los demás al cielo de la honra y a desear la justa alabanza.» Tal fue la alta ocasión, como él mismo dice, en que se quedó manco Miguel de Cervantes, y a esta última ocasión lleváronle sus mal aventurados y trágicos amores con doña Guiomar. Pero no dejemos por terminar el relato sucinto de la batalla.
Hablando como es justo la verdad, Que el hombre es lo que solo allá les resta, Pues vemos plomo saca Melgarejo, Y hierro, con tener poco aparejo. Al Paraná es ya tiempo que dejemos, Y al Paraguay ameno revolvamos; En el cual á la clara bien veremos, Que está cifrado el bien que deseamos.
Hullin, que no sabía casi nada de Historia, estaba admirado de que el loco conociese tantos nombres. ¡Bah, dejemos eso, Yégof le dijo , y come un poco de sopa para que te calientes el estómago!
El escudero del Bosque asió por el brazo a Sancho, diciéndole: -Vámonos los dos donde podamos hablar escuderilmente todo cuanto quisiéremos, y dejemos a estos señores amos nuestros que se den de las astas, contándose las historias de sus amores; que a buen seguro que les ha de coger el día en ellas y no las han de haber acabado.
Pero dejemos la Historia, por respetos á la ley de imprenta que nos rige. De Madrid á Valladolid hay treinta y cuatro leguas y pico, que se andan en veintitrés horas. Llegué, pues, á las cinco de la mañana á la ciudad de D. Álvaro de Luna. Ya allí el calor era soportable, el aire elástico, la vegetación risueña. Todos pronostican á Valladolid un porvenir muy lisonjero.
Dejemos estas armas colgadas de algún árbol, en lugar de un ahorcado, y, ocupando yo las espaldas del rucio, levantados los pies del suelo, haremos las jornadas como vuestra merced las pidiere y midiere; que pensar que tengo de caminar a pie y hacerlas grandes es pensar en lo escusado.
Pero henos ya en lo alto del barrio de las Peñuelas y cerca de la meseta donde se alza el grandioso Colegio del Arzobispo..... Dejemos la pluma y cojamos el pincel.
Dejemos que ellos mismos se expliquen y copiemos al pie de la letra sus palabras. Al fin se dignó Vd. venir a despedirse de mí antes de su partida dijo Pepita . Yo había perdido ya la esperanza. El papel que hacía D. Luis era de mucho empeño y por otra parte, los hombres, no ya novicios, sino hasta experimentados y curtidos en estos diálogos, suelen incurrir en tonterías al empezar.
Pero dejemos esto aparte por agora, que tiempo habrá donde lo ponderemos y pongamos en su punto, y dime, Sancho amigo: ¿qué es lo que dicen de mí por ese lugar? ¿En qué opinión me tiene el vulgo, en qué los hidalgos y en qué los caballeros? ¿Qué dicen de mi valentía, qué de mis hazañas y qué de mi cortesía? ¿Qué se platica del asumpto que he tomado de resucitar y volver al mundo la ya olvidada orden caballeresca?
Dejemos vanidades agora dijo el Cojuelo : que ya sé que eres muy bien nacido en verso y en prosa, y vamos en busca de un figón, a almorzar y descansar, que bien lo habrás menester por lo trasnochado y madrugado, y después proseguiremos nuestras aventuras.
Palabra del Dia
Otros Mirando