United States or Cabo Verde ? Vote for the TOP Country of the Week !


39 Mas yo os digo: No resistáis con mal; antes a cualquiera que te hiriere en tu mejilla diestra, vuélvele también la otra; 40 y al que quisiere ponerte a pleito y tomarte tu ropa, déjale también la capa; 41 y a cualquiera que te cargare por una milla, ve con él dos. 42 Al que te pidiere, dale; y al que quisiere tomar de ti prestado, no se lo rehuses.

El sello de sus hazañas marcaba siniestramente su rostro en un chirlo, que le cogía desde la frente hasta el carrillo, cegándole un ojo y abollándole media nariz. Los cinco detuvieran al anciano. "¡Mátale, mátale! dijo con aguardentosa voz el matutero, pinchando con la varita que llevaba en la mano el pecho de Elías. No, déjale, Perico. ¿De qué vale espachurrar á este bicho?

La naturaleza franca y viva del uno no concordaba bien con el temperamento frío y calculador del otro. Sorege había sido siempre reservado con Tragomer y cuando éste se lo hacía observar á su amigo común, Jacobo respondía: "Déjale. Hay que tomar á Juan como es; no conseguiremos cambiarle. Es un diplomático; jamás dice lo que piensa."

, don Rodrigo Calderón; pero saldrá tarde; aunque te llaman luego á palacio, esto importa más, créeme; espera aquí, porque podrá suceder que don Rodrigo salga temprano, dentro de un momento; podrá suceder también que salga acompañado; en ese caso... déjale, y vuelve mañana á este mismo sitio hasta que le veas solo. ¿Pero estás seguro de tu valor y de tu destreza?

Parece que me tienes miedo le dijo él siempre serio y tranquilo . No por qué. Ya habrás visto que a razonable no me gana nadie. Otra cosa: enséñame a tu hijo. Fortunata volvió a sentir terror, y al ver que Maxi alargaba las manos hacia donde estaba el pequeñuelo, las apartó con las suyas, diciendo: «Otro día le verás... Déjale... está dormido y me le vas a despertar».

Doña Encarnación habló antes que su marido, y dijo al oír aquellas proposiciones: estas loca, hija mía, y yo supongo que ni tu locura será contagiosa ni se la pegarás a tu madre. Imperdonable estupidez sería que ambas os arruinaseis por salvar a un pillastre. Anda, déjale que vaya a presidio. Aquel es su término natural e inevitable.

Nada de fintas, ¿entiendes?... Los golpes han de ser rápidos y decisivos... Déjale a él que finte cuanto quiera... quieto, sereno, aplomado... a parar y contestar nada más... Ya caerá en alguna contestación. ¡Pues no ha de caer! Miguel mojaba distraídamente el bizcocho en el chocolate pensando Dios sabe en qué.

Déjale partir; lanza de tu pecho el fuego del amor impuro; ámale como a tu prójimo, por el amor de Dios. Guarda su imagen en tu mente, pero como la criatura predilecta, reservando al Creador la más noble parte del alma. No lo que te digo, hija mía, porque estoy muy turbado; pero tienes mucho talento y mucha discreción, y me comprendes por medias palabras.

Los mismos; ELECTRA, por la izquierda con el niño en brazos. El niño es de dos años, poco más o menos. ELECTRA. ¡Hijo de mi alma! EVARISTA. Niña, por Dios, déjale y vámonos. Que llegamos tarde... Es un rasgo de maternidad. Yo lo aplaudo. MARQU

¿Y si viene alguien por la puerta falsa? Si es Pepe Vera, déjale entrar, que tengo que decirle. Echa las persianas y vete. Salió la criada y a los pocos pasos volvió atrás, dándose un golpe en la frente. Aquí dijo hay una carta que el amo ha dejado a Nicolás para entregárosla. Vete a paseo con tu carta dijo María ; aquí no se ve y además quiero dormir. ¿Qué me dirá?