Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 3 de mayo de 2025
Y eso que desde aquel beso, y por virtud también de las ponderaciones que de la hermosura y gracias de la hija hacían delante de ella las amigas de la madre, parecía que ésta la iba cobrando cierta inclinación, que no disimulaba.
Y entonces Moro se apresuraba a dar los tres o cuatro tacazos definitivos, y entre uno y otro se hacía poner el abrigo por el mozo para no perder tiempo, y pagando o cobrando con mano nerviosa el saldo de su cuenta, corría desalado con la lengua fuera hasta casa del deán. El tresillo de éste duraba hasta las ocho. A casa a cenar. A las nueve, escapado a la de D. Pedro Quiñones, a empalmarlo.
Ayela, de horror transida, que en la voz jóven, sonora, á Ataide escuchado habia, sus fuerzas cobrando todas, por un milagro de amor, cual revive luminosa y brilla por un momento una luz que á su fin toca, ansiosa, rápida, ardiente, corrió, llegó, y animosa entre las fieras cuchillas se arrojó, sublime, heroica, para defender la vida del que era su sangre propia.
Pronto comprendieron que debían, primero, gastar con más prudencia, porque las rentas iban mermando considerablemente, y segundo, andarse con pies de plomo en lo que se refería a dejarse galantear, porque entre sus propias imprudencias y la malignidad del tutor y su hermana, iban ellas cobrando reputación de frívolas y ligeras.
Si es eso lo que usted quería decirme... La justicia está ya encargada de esto y de devolver a Inés al jefe de la familia. Asunción alzó la vista y miró a su madre. Parecía deseosa de hablarle, pero con tanto miedo como deseo. Al fin, cobrando valor, se expresó de este modo con voz quejosa y tristísima, que producía en mí extraña sensación. Señora madre, ¿me permite usted que hable una palabra?
El vino seguía bajando á raudales por aquellas gargantas, y la enfermería cobrando su acostumbrado tributo.
Por ausencia de Martinán estaba una noche Quino ayudando á Eladia en el despacho. Detrás del mostrador desatando los pellejos de vino y escanciando y cobrando semejaba ya el asociado afortunado del afortunado Martinán. La taberna estaba llena de paisanos y mineros.
De pronto Ramiro levantó una pierna para cruzarla sobre la otra, y a un tiempo, como un solo ser, todos los roedores dispararon hacia los muros en instantánea fuga. Luego reaparecieron, se aproximaron, y cobrando confianza, rodearon por completo el asiento del joven hidalgo. Cuando Casilda regresó, Ramiro dormía profundamente. La muchacha contemplole un buen rato, temiendo quizá despertarle.
Entre semejantes lecturas y el roce de tales parroquianos, Cristeta fue cobrando desmesurada afición al teatro.
En un principio, Judit quedó anonadada por la lectura de esta carta. Pero luego, cobrando ánimo, consultó a su corazón, apeló a todas las energías, y contestó lo siguiente: * «Monseñor: »Me trata usted con mucha crueldad; y, no obstante, podría asegurar ante Dios que nada tengo de qué acusarme.
Palabra del Dia
Otros Mirando