Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 20 de octubre de 2025
A las tres, otra ola, que embistió de costado a la chalupa, estuvo a punto de volcarla; pero Van-Horn, que no abandonaba la caña del timón, la salvó con una brusca virada, mientras el Capitán, sin perder un momento la calma, aflojaba rápidamente la cuerda de la vela. Casi en el mismo instante Cornelio, que estaba a proa, señalaba una costa.
Durara aún la homilía, acompañada de blandos golpecitos en los hombros, a no interrumpirla la trepidación del tren, brusca como la realidad. Produjose confusión momentánea. Se apresuró el novio a despedirse de todo el mundo con cierta llaneza cordial, donde ojos expertos podían advertir matices de afectación y superioridad protectora.
Al abrir mi puerta me sorprendí desagradablemente al ver en el estrecho corredor á la mujer del conserje de la casa, que pareció demudarse por mi brusca aparición. Esta mujer había estado en otro tiempo al servicio de mi madre, quien le tomó cariño y le dió al casarla la posición lucrativa que hoy tiene.
Voy a preguntarle al dueño de esta casa quién tiene más autoridad aquí, si su anciana y buena madre, o esta aventurera polaca. Y se retiró sin cesar de gritar. Temblando de cólera, comencé a pasearme por el cuarto. Nunca me habría imaginado que esa madre abrumada por el dolor pudiera cambiarse tan brusca y completamente en una arpía.
Octavio, en la misma postura y absorto en sus pensamientos, no parecía haber notado su marcha brusca ni escuchar las caprichosas notas que salían del piano. Los dedos de la dama, cansados sin duda de vagar á la ventura por el teclado, empezaron á señalar delicadamente una melodía. Era il sol de l'ánima. Á Octavio le dió un vuelco el corazón y volvió rápidamente la cabeza.
Sola contestó que no había podido dormir en toda la noche, porque las cosas tremendas que contó Primitivo y los augurios que hizo llenaron de misterioso pavor su espíritu. Verdad era esto que dijo; pero también había influido mucho en su insomnio doloroso la brusca y radical mudanza en su destino, en sus ideas todas por la conversación que ella y su dignísimo protector tuvieron a orillas del río.
Beatriz de pronto, como quien toma una brusca resolución: ¡Márchese, se lo ruego!... Pero antes quiero darle algo para ella. Y se dirigió con rápido paso hacia la quinta. Su departamento personal, compuesto de un gran salón, gabinete y dormitorio, ocupaba toda la planta baja. La habitación de Jacques y de Marcela estaban en el primer piso.
El silencio más absoluto reinó un momento, y después una misteriosa voz lanzó desde el camino este consejo: Prueba en casa de Magdalena. Al dar el vehículo una brusca vuelta, alcanzamos a vislumbrar los caballos delanteros, y luego un jinete que se desvanecía en la bruma. Indudablemente, emprendíamos el camino de la casa de Magdalena. ¿Quién era y dónde estaba Magdalena?
En algunas calles, angostas como corredores, las fachadas se levantaban siempre obscuras, y sólo en lo alto ardía, sobre la cal, la brusca faja de sol. Sobre estos canales de sombra, los balcones cerrados suspendían su cofre de espionaje y de misterio. A veces un brazo blanco como la nieve asomaba entre las maderas y arrojaba hacia Ramiro una flor o una alcorza.
Madama Scott y miss Percival iban y venían, examinando con infantil curiosidad la instalación del cura. El jardín, la casa, todo es precioso aquí decía madama Scott. Las dos entraron resueltamente a la cocina. El abate Constantín las seguía sofocado, azorado, estupefacto ante tan brusca y repentina invasión americana. La vieja Paulina miraba a las dos extranjeras con aire inquieto y sombrío.
Palabra del Dia
Otros Mirando