Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 13 de mayo de 2025
El duque tiró de ella, llegó al postigo, tomó la llave de la parte de adentro, la puso por la parte de afuera, cerró, guardó la llave y se alejó con Esperanza. A la revuelta de la primera calle, el duque dió una palmada. Acercaron una ancha silla de manos, y Esperanza y el duque entraron en ella. La silla se puso inmediatamente en movimiento. Esperanza guardaba silencio; el duque meditaba.
En tres años que tardó en parecer y volver a su casa aprendió a jugar a la taba en Madrid, y al rentoy en las Ventillas de Toledo, y a presa y pinta en pie en las barbacanas de Sevilla; pero con serle anejo a este género de vida la miseria y estrecheza, mostraba Carriazo ser un príncipe en sus cosas: a tiro de escopeta, en mil señales, descubría ser bien nacido, porque era generoso y bien partido con sus camaradas.
Bringas le dio un abrazo. «¿Y el titulado Prim dónde está?» preguntó. Oí que le habían dado un tiro... Y si no, se lo darán más tarde... Yo sostengo que si la Reina tuviera ánimo para venirse acá y presentarse, y echar una arenga, diciendo: todos sois mis hijos, se arreglaría esto fácilmente.
Cuando más empeñada era la lucha y más desesperadamente se resistía don Bernardino, éste recibió un tiro por la espalda que le hizo caer sin vida, y de allí á poco fué muerto también el fiel perro que tanto le defendió, terminando de tan trágico modo aquella sangrienta escena.
Entonces, aturdido enteramente, vacilante, asustado, semimuerto, salió del patio del alcázar, en donde se encontraba, y escapando por la puerta de las Meninas, tiró hacia el laberinto de callejas del cuartel situado frente al alcázar, y se perdió en él. Por aquel mismo tiempo el padre Aliaga se paseaba en su celda.
Tus perros, linda cazadora, han descubierto este par de piezas... ¡Tira, tira sobre ellas! exclamó don Germán riendo. ¡Fuego! respondió la joven acercándose a él y dándole un beso en la mejilla. Dispara el segundo. Mira que la otra pieza se escapa. Clara se ruborizó. Aunque se escape volverá de nuevo al tiro como las palomas torcaces.
Con sus brazos enjutos tiró de la cuerda, izando la pequeña vela triangular de la embarcación.
De pronto estalló la cólera de Ulises... El oficial holandés, el sabio naturalista, el cantante que se pegó un tiro, y ahora el falsificador de antigüedades... Pero ¿cuántos hombres había en su existencia? ¿Cuántos quedaban aún por llegar?... ¿Por qué no los soltaba todos de una vez?... Freya quedó sorprendida por la violencia del exabrupto. Le daba miedo la cólera del marino.
Aquí ha habido quien se ha pegado un tiro por haber perdido seiscientos reales a una carta. Y cuando un señorito se gasta cien claretes con una mujer, dicen que ha arruinado a la familia.
Asomóse en esto á la ventana la muger del ministro, y viendo á uno que dudaba de que el papa fuera el ante-cristo, le tiró á la cabeza un vaso lleno de.... ¡O cielos, á qué excesos se entregan las damas por zelo de la religion!
Palabra del Dia
Otros Mirando