Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 22 de mayo de 2025
Esta mañana dijo me contásteis una historia muy triste. Margarita, cuando estaba más loca, llamaba á su hermano Luis... vos os llamáis Luis, padre Aliaga; hace muchos años que pasó esto, y entonces debíais ser muy joven; ¿sois vos, acaso, el Luis que recordaba Margarita? Me habéis dicho que la hija de esa desdichada se parece mucho á su madre; cuando la vea podré deciros... ¿Queréis verla?
Fue muy bien recibida; la del Banco se la comía a besos, le hablaba de modas, le mandaba patrones a casa, y le recordaba visitas que tenía que pagar y a que ella la acompañaba, porque don Víctor se negaba a perder el tiempo en estos cumplidos.
No era una mujer nerviosa y fantástica, pero conocía ya bastante bien y a sus expensas el temperamento de su marido, para quien los granos de arena eran montañas y los céfiros violentos huracanes. Recordaba con terror su triste noche de novios y temblaba ante la idea de que se repitiesen aquellas escenas de desesperación y de lágrimas.
Los muertos mandan, y es inútil que los vivos se resistan a obedecer. Todas las rebeliones por salir de esta servidumbre, por romper la cadena de los siglos, todas mentira. Febrer recordaba la rueda sagrada de los indios, símbolo budista que había visto en París al presenciar una ceremonia religiosa oriental en un museo. La rueda es el símbolo de nuestra vida.
Aunque el dolor por la muerte de Doña Blanca se había ido mitigando en todos aquellos corazones, Clara la recordaba con ternura melancólica, y el Comendador con cariño y con penoso arrepentimiento á la vez. Sólo D. Valentín, que comía como un buitre, y que había engordado, y no hallaba quien le riñese ni quien le dominase, se creía en la obligación de llorar cuando menos ganas tenía.
Y entonces yo, puesto que tenía descontado el aplazo, quise al menos darme el gusto de hablar con libertad. Muñoz le interrumpió, para demostrarle que recordaba todas las incidencias del asunto. Efectivamente, sin que se pudiera advertir demasiado tu intención, pusiste su libro en la picota. ¡Qué bien hablaste!
Severiana, que recordaba haber visto en su lugarejo uno por el estilo, le cuidaba y atendía cual si fuera de carne y hueso: su espíritu inculto, pero delicado, establecía una relación misteriosa entre aquel Jesús y su niña.
La joven introdujo á Cipriano en una pequeña pieza, especie de santuario en el que la señora de Freneuse había reunido todo lo que le recordaba á su hijo, retratos, libros, dibujos, que representaban allí al que la infeliz mujer no había dejado de llorar, á pesar de sus faltas.
Recordaba que en las enfermedades de sus padres y de sus hermanos, todos ya muertos, siempre había tomado al médico por Providencia; en vano era que en los tiempos de salud en casa participase del general escepticismo de que los mismos doctores solían hacer alarde; caía un ser querido en cama, y ya estaba Bonifacio creyendo en la medicina.
El grande hombre inspiró lástima á Desnoyers. Hacía esfuerzos por conservar su serenidad estoica de padre á estilo antiguo, recordaba á sus ascendientes gloriosos y á todas las figuras heroicas de la República romana.
Palabra del Dia
Otros Mirando