United States or Montserrat ? Vote for the TOP Country of the Week !


Y también me calzaré las manos con eso que llaman guantes, que no pienso quitarme nunca como no sea sino para tomar el pulso.... Tendré un bastón con una porra dorada y me vestiré... eso , en mis carnes no se pone sino paño fino... ¡Córcholis! Te vas a reír cuando me veas.

SANCHO. No me dilates, señor, Tanto bien; mis ansias mira, Y que desde aquí a mañana Puede un pequeño accidente Quitarme el bien que presente La posesión tiene llana. Si sabios dicen verdades, Bien dijo aquel que decía Que era el sol el que traía Al mundo las novedades. ¿Qué yo lo que traerá Del otro mundo mañana? D. TELL. ¡Qué condición tan villana! ¡Qué puesto en su gusto está!

Cerrado el inciso, y otra vez al tema: «¡Vaya con lo que me ha dicho esta mañana Nicolás: que Feijoo es el primer caballero de Madrid y que le ha prometido una canonjía! Si se la dan, ya no me queda nada que ver. Yo me alegraría, para quitarme esa carga de encima; pero ¡qué tiempos y qué Gobiernos! ¡Ah!, si yo gobernara, si yo fuera ministra, ¡qué derechitos andarían todos!

Ahí está ese gaznápiro decía don Bernardino, espiando lo que no le importa; ¡y pensar que con media palabra mía, podía quitarme semejante estorbo! Por su parte, don Pablo Aquiles se irritaba cada vez que veía pasar al odiado personaje. ¡Cerrar esa puerta! prorrumpía apartando el mamotreto que estudiaba, ¡qué negros éstos! Nada, tendré que cambiar de sitio.

Calló en diciendo esto don Quijote, y el de lo verde, según se tardaba en responderle, parecía que no acertaba a hacerlo; pero de allí a buen espacio le dijo: -Acertastes, señor caballero, a conocer por mi suspensión mi deseo; pero no habéis acertado a quitarme la maravilla que en causa el haberos visto; que, puesto que, como vos, señor, decís, que el saber ya quién sois me lo podría quitar, no ha sido así; antes, agora que lo , quedo más suspenso y maravillado. ¿Cómo y es posible que hay hoy caballeros andantes en el mundo, y que hay historias impresas de verdaderas caballerías?

Y juzgando que las palabras no bastaban para demostrar su cólera, me dio una bofetada, me pegó con fuerza, y me echó como a un perrillo. Corrí a mi cuarto y me atrincheré sólidamente. Lo primero que hice fue quitarme la bata y comprobar por medio del espejo que los dedos secos y flacos de mi tía habían dejado marcas azules en mis hombros.

Usted es muy bueno.... Es un bien que él haya sanado de sus ojos.... Yo me digo a misma que es un bien... pero después de esto, yo debo quitarme de en medio... porque él verá a la señorita Florentina y la comparará conmigo... y la señorita Florentina es como los ángeles, y yo... compararme con ella es como si un pedazo de espejo roto se comparara con el sol.... ¿Para qué sirvo yo?

Mis baladronadas hicieron gracia a la vieja, y me dio mil golosinas para quitarme el mal humor. Al día siguiente me obligó a limpiar la; discreto animal, que hablaba como un teólogo y nos despertaba a todos por la mañana, gritando: perro inglés, perro inglés. Luego me llevó consigo a misa, haciéndome cargar la banqueta, y en la iglesia no cesaba de volver la cabeza para ver si estaba por allí.

Nada me dijo entonces que pudiera hacerme concebir sospechas. Sólo cuando estuvimos en el tren y quedamos solos, noté que me miraba fijamente y de un modo particular. Yo me fui al opuesto rincón. Traté de descansar y quise quitarme los zapatos porque me lastimaban. Entonces él se brindó a sacármelos, y sin esperar contestación se puso a hacerlo. Me pesaba ya muchísimo de haber ido con él.

ABIND. Esos ojos, A quien por justos despojos Mil almas quisiera dar. ¿No respondéis? Culpa os doy, Lengua de fuego inhumano. No me miran como a hermano; No es posible que lo soy. Pues ¿preguntaré a la boca? Esta no dirá verdad, Cuando pura voluntad El instrumento no toca. Pues ¿a los tiernos oídos? Pero ya con escucharme, O pretenden consolarme O quitarme los sentidos.