Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 12 de mayo de 2025


Esta embajada tan cortés, dice Pachimerio que fué por el miedo que tuvieron del ejército de Miguel Paleólogo, que se habia juntado para reprimir su atrevimiento y osadía.

Contra lo que pudiera presumirse, don Fermín no cayó como un rayo sobre él. Sacó un inmenso pañuelo de yerbas para sonarse y replicó: No qué le diga a usted, D. Félix; ahora está toda la savia arriba y apenas ha caído flor... ¡Eso qué importa!... Los perales tienen la corteza dura, y los castaños y los nogales lo mismo dijo el escribano con creciente osadía.

El que ha entrado en esta casa usurpando un nombre para mejor engañarnos; el que se ha vendido por amigo y dependiente de la casa para seducir a la hija de su dueño; el que ha tenido la osadía de oponerse con el revólver en la mano a que se cumpliese la voluntad de una madre, produciendo un escándalo en la calle, no debe venir hablándonos de sus sentimientos, porque ya los conocemos bien.

Saliendo á la conquista ha padecido Grandìsimos trabajos y fatigas: En gran tiempo no hubieron parecido Los indios, aunque son mas que hormigas. Loyola, porque el campo afligido, Siguiendo aquestas gentes enemigas, Con solos dos soldados parte un dia, Con un esfuerzo grande y osadia.

Y valer, en aquellas ocasiones, significaba ser cualquier cosa, menos hombre indigestamente grave, corto de genio, feo sin gracia, ignorante sin osadía, galán ruboroso..., y así por el estilo; porque allí, hasta el saber macizo y serio había de derramarse en dosis muy concentradas y con mucha sal y pimienta: todo menos la pesadez y la petulancia.

Pues a despecho de estos remordimientos, de su invencible timidez y de los clamores de la razón, Raimundo se sentía cada día más subyugado por aquella mujer. Verdad que Clementina puso en juego todas las armas de que disponía, que no eran pocas ni mohosas todavía. A medida que aumentaba la timidez de su juvenil adorador crecía en ella la osadía y el aplomo.

Bettina sentíase llena de confianza y osadía. Tenía fiebre, pero esa fiebre que en el campo de batalla da al soldado el ardor, el heroísmo y el desprecio del peligro. La emoción que aceleraba los latidos de su corazón era una emoción elevada y generosa. Ella se decía: «¡Quiero ser amada! ¡Quiero amar! ¡Quiero ser feliz! ¡Quiero que él sea feliz!

Eran destellos de la enorme pupila las gotas de refulgente argentería líquida que saltaban de rayo a rayo, a cada vuelta; y el quejido penoso que la pesada rueda exhalaba al girar, completaba el símil, remedando el hálito del monstruo. Un puente lanzado con osadía sobre el mismo arco de la catarata que formaba la presa dejaba ver, al través de su tablazón mal junta, el agua espumante y rugiente.

Al final de uno de ellos, el punto luminoso que brillaba en el ojo de una cerradura le indicó el cuarto de Josefina. Avanzando entonces confiadamente, posó la mano temblorosa sobre el pasador de la puerta, y, seguro de la impunidad de su osadía, abrió de pronto.

A D. Gabriel el caso refiriendo El guaraní con pecho y osadia, Y toda la maraña descubriendo, Que trabada Salgado ya tenia, Al tiempo que la iba mal tejiendo, El hilo conocido descubria El triste de Salgado, de tal suerte, Que vino á fenecerse con la muerte.

Palabra del Dia

commiserit

Otros Mirando