Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 18 de julio de 2025


El gusto, si está olvidado, ¿Qué pregunta le he de hacer? Que el gusto de la mujer No quiere ser preguntado. Mas ¿qué importa, ojos, oídos, Boca, manos, gusto, haceros Testigos, si he de perderos Sólo porque sois queridos?

Tendría curiosidad de saber... dijo Juan. Nada, nada; no sabréis nada. No quiero haceros ruborizar, y os veríais obligado a ruborizaros. Luego, volviéndose hacia el cura, agregó: Y sobre vos también, señor cura, hemos pedido datos. Parece que sois un santo... ¡Oh! eso que es bien cierto exclamó Juan. Esta vez fue el cura quien interrumpió la elocuencia de Juan.

Apeaos, y usad de vuestro compás de pies, de vuestros círculos y vuestros ángulos y ciencia; que yo espero de haceros ver estrellas a mediodía con mi destreza moderna y zafia, en quien espero, después de Dios, que está por nacer hombre que me haga volver las espaldas, y que no le hay en el mundo a quien yo no le haga perder tierra.

Se le hace girar sobre este vértice, a fin de que me quede siempre hacia fuera la epidermis, se le rebate hacia abajo y se cosen sus bordes a los de la herida. En otros términos, puedo haceros otra nariz bastante presentable a expensas de vuestra frente. El éxito de la operación es casi cierto; pero siempre conservaréis en la frente una extensa cicatriz.

No maliciaba aún el peligro de aquel ingenuo aliento de orgullo y de fuerza a que todas sus frases trascendían. Por fin, paseándose una tarde por la Rúa, con Miguel Rengifo, el único amigo que le quedaba, díjole en un momento de afectivo calor: Si yo medro, Miguel, e después de algún hecho señalado me hacen gobernador de una plaza, os he de llamar junto a para haceros mi primer capitán.

Si os las puedo pagar en haceros vengado de algún soberbio que os haya fecho algún agravio, sabed que mi oficio no es otro sino valer a los que poco pueden, y vengar a los que reciben tuertos, y castigar alevosías.

No quiere Dios angustiaros, sino haceros puros y derramar sobre vosotros sus gracias para que seais agradecidosAsí se espresa el Profeta en la Sura quinta de su Koran, y sobre estas palabras arman los musulmanes toda la artificiosa y ridícula máquina de su purificacion y abluciones.

Los brazos desnudos hasta el codo; un gran ramo de rosas rojas en la abertura de la bata, una rosa prendida en los cabellos con un alfiler de brillantes y nada más. Madama Scott notó, de repente, que Juan estaba militarmente ocupado por sus dos hijos. ¡Oh, señor, os pido mil perdones! Harry, Bella... Dejadlos, señora, os lo ruego. ¡Estoy sumamente contrariada, por haceros comer tan tarde!

Mas, suplico que no se me crea de corazón liviano e inconstante, porque este olvido fue solamente momentáneo y tres días después de mi llegada al Pavol, escribía a mi cura la siguiente carta: «Mi querido cura: Tengo tantas cosas que deciros, tantos descubrimientos que participaros, tantas confidencias que haceros, que no por dónde empezar.

El padre Aliaga comprendió que el cocinero mayor estaba bastante asustado para que fuese necesario asustarle más, y que seguir asustándole sería dar motivo á que no dijese una palabra con concierto. Vamos, vamos; no os he hecho venir... Perdone vuestra señoría; me han traído preso. Pues bien, no os he mandado prender para manteneros preso, sino para que viniérais. No pretendo haceros mal alguno.

Palabra del Dia

buque

Otros Mirando