Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 5 de junio de 2025


De esto nace, que semejantes razonamientos por lo comun prueban poco. Con el método de las Escuelas si uno establece una cosa vana, se le pone en el estrecho de que lo conozca y lo confiese, si no es pertinaz: á lo menos lo conoce todo el concurso, y no permite que el error triunfe de la verdad.

Me levanté al acercárseme, dispuesto a cederle el sitio y sin pensar que se hubiese molestado por . Pero ella, con un gracioso ademán, me hizo seña de que me volviera a sentar. Confiese usted, caballero, que no es usted curioso me dijo sonriendo. ¿A qué se refiere la observación?

Pero que llena mi espíritu como una enseñanza suprema. ¡Si a veces pienso en que has realizado en un caso de «avatar», como el de Gauthier, ¿te acuerdas? No lo he leído. ¿No?... ¡qué raro! Lo raro es que lo confiese, porque nadie lo hace; ¿te has fijado? ¿El qué?

9 Por lo cual Dios también le ensalzó a lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre; 10 que al Nombre de Jesús toda rodilla de lo celestial, de lo terrenal, y de lo infernal se doble. 11 Y todo lenguaje confiese que el Señor Jesús el Cristo está en la gloria de Dios, el Padre.

Vamos, don Bernardino, confiese usted que esto se acaba, de seguir así; si las economías y la buena administración y la política honrada y todo eso que usted nos canta ahí, no es infundio puro, ¿por qué continúa el oro su viaje a las regiones etéreas? Calma, mi amigo, ¿acaso pretende usted que la situación se normalice de golpe y porrazo? Hay que ir despacio, ensayar medios, ver, consultar...

Háblale á esa mujer, hermano, le dijo el Sr. Wilson. Es de la mayor importancia para su alma, y por lo tanto, como dice nuestro digno Gobernador, importante también á la tuya, á cuyo cargo está la de esa mujer. Exhórtala á que confiese la verdad. El Reverendo Sr. Dimmesdale inclinó la cabeza como si estuviera orando, y luego se adelantó.

¡Bah!... Ya salió otra vez el rasgo novelesco. Porque ha venido al caso que salga; no por lo que tiene de novelesco, que no tiene nada, como usted mismo cree, aunque no me lo confiese, sino como revelación del alma más noble y generosa que ha encarnado en cuerpo humano. ¡Qué entusiasmos, hombre!... No parece sino que todos... Es justicia, señor don Alejandro, créalo usted; y porque viene a pelo.

Así por el reconocimiento de los ánimos de los súbditos les es cosa fácil buscar alborotos, y ponerlos en discordia y menosprecio de la persona del príncipe: de donde es necesario concluir, que no conviene á los intereses del estado que ningun principe se confiese, ni menos consienta lo haga alguno de sus confidentes, familiares, secretarios, consejeros y ministros principales, con personas que con tanto cuidado procuran espiar las materias de estado, y que se sirven de estas como de medio necesario para granjear la gracia de los príncipes; pues no faltan hoy religiosos, y hombres de vida y doctrina no inferior á la de estos padres, de quien se pueden valer, porque no entienden ni cuidan de otra cosa que del gobierno de las almas y de sus monasterios.

«No basta escribía , ¡oh mi Dios!, que yo me confiese contigo. ¿Qué tinieblas no penetras con tu claridad? ¿En qué abismo no se hunde tu mirada? lo sabes todo. Nada tengo que decirte. Sólo debo pedirte perdón. Pero el peso de este misterio de mi alma me abruma, mientras sin tomar forma, sin revestirse de la palabra, vive en mi centro, conociéndole solo.

JULIA. Porque sus amigas tendrán unos esposos imbéciles o torpes; lo cual viene a ser lo mismo. O bien porque ellas serán bastante tontas y se habrán asqueado de un juego en el que no ganaban desde el primer instante. «No hay atajo sin trabajo», ha dicho un fabulista. DORA. ¡Confiese usted que todo esto resulta muy complicado!

Palabra del Dia

rigoleto

Otros Mirando