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Actualizado: 26 de junio de 2025


España, prescindiendo de la resolución que en pos de los insultos puede venir, arrastrándonos fatalmente á una guerra sangrienta y ruinosa, y considerando sólo los insultos, conviene que los juzgue y condene con las palabras mismas del gran poeta inglés: «Tales told by idiots, full of sound and fury, signifying nothing».

Si a usted le repugnan a veces ciertas palabras, ciertas acciones de estas buenas señoras, no se deje llevar por la imaginación, no las condene ligeramente; perdone las flaquezas ajenas y piense bien, y no se cuide de apariencias.... Y ahora, hablando un poco de , ¡si usted pudiera penetrar en mi alma, Anita! yo que jamás podré pagarle esta hermosa resolución de esta tarde....

Para el que ama el estudio y procura recoger con cuidado las observaciones que la vida de un pueblo ofrece, es sumamente útil el viaje á Inglaterra. El pueblo ingles solo tiene en el continente apologistas ó detractores: unos condenan su civilizacion, otros la encomian y preconizan, sin que acierten á formular un juicio imparcial que condene lo malo y aplauda lo que sea bueno.

Julî no contestó y ambas mujeres bajaron. En la calle, la joven se negó tenazmente á ir al convento y se retiraron á su barrio. Hermana Balî que se sentía ofendida de la falta de confianza yendo con ella, se vengaba endilgándola un largo sermon. La verdad era que la joven no podía dar aquel paso sin condenarse á misma, sin que la condenen los hombres, ¡sin que la condene Dios!

Lo que ocurre es que las he hecho ver lo infame, lo horrible del olvido en que tenían a Dios, el peligro que corrían de condenarse y de que se condene nuestro padre: han comprendido que me sobraba razón, y han puesto el remedio.

14 Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así es necesario que el Hijo del hombre sea levantado; 16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo Unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. 17 Porque no envió Dios a su Hijo al mundo, para que condene al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él.

Un sentimiento de abnegación se alza de las profundidades de mi ser, y me llama a , y me dice que todo mi ser debe darse y perderse por el objeto amado. Ansío confundirme en una de sus miradas; diluir y evaporar toda mi esencia en el rayo de luz que sale de sus ojos; quedarme muerto mirándola, aunque me condene. Lo que es aún eficaz en contra el amor, no es el temor, sino el amor mismo.

Si hubieramos de estar á aquel punto, á aquella estacion, á aquel estado en que encontró y navegó el rio Villarino, es menester confesar su inutilidad: pero si todo ello varía con la diferencia de tiempos, y con mas repetidas pruebas que dén una verdadera luz de los canales, arrecifes, saltos y corrientes del rio, demostrando el modo de vencerlas con otros auxilios, parece en algun modo extraño que con tanta viveza, sin esperar á distinto conocimiento práctico, se condene y falle por inútil un asunto que tanto interesa á nuestra felicidad.

Y si ocultáis vuestro amor, si le devoráis... porque al fin ella es una mujer casada, y vos sois un fraile; si tenéis la virtud de sufrir en silencio vuestro infierno; si sabéis cuánto ofendéis á Dios, porque os está prohibido amar á otro que á Dios y amáis á vuestra reina... si sabéis que puede llegar un día en que blasfeméis, y en que la blasfemia os condene... ¿por qué queréis que una mujer libre engañe á Dios y se encierre en un claustro, y dentro de él sufra un infierno de amor, y blasfeme, y se condene también? Yo... puedo servirle, amarle con toda mi alma sin ofender al mundo, porque no soy casada; sin ofender á Dios, porque no soy esposa de Dios. Y haced de lo que queráis: prendedme, matadme, llevadme á la hoguera... Dios sabe que no le he ofendido, que le adoro, que creo en

El encarnado no es natural, se parece al que produce el otono sobre las hojas marchitas. Ella es ciertamente, io cielo! y yo itiemblo al mirarla, al mirar Astarte! No, no puedo hablarle, pero quiero que ella hable, que me condene o me perdone. Por el poder que te ha hecho salir de la sepultura que te servia de prision, habla al que acabas de oir, o a aquellos que te han invocado.

Palabra del Dia

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