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Los demás cobraron tanto miedo á la muerte, que les amenazaban las viruelas, que el mismo día que aquellos dos murieron, dejaron descuidar á los nuestros y todos se huyeron menos dieciocho adultos y veinte muchachos.

1 Y Joram hijo de Acab comenzó a reinar en Samaria sobre Israel el año dieciocho de Josafat rey de Judá; y reinó doce años. 2 E hizo lo malo en ojos del SE

5. ¿Cómo se descubrió el río que ahora se llama de la Plata? 6. ¿Quién lo exploró y le dió nombre? 7. ¿Quiénes colonizaron esta región? 8. ¿Qué forma de gobierno existía en el país en el siglo dieciocho? 9. ¿Qué circunstancia animó a los argentinos a declarar su independencia? 10. ¿Qué centenario celebró la Argentina en 1916? 11. ¿Quién se hizo dictador en la Argentina?

Yo contaba dieciocho años y Bettina nueve; quedábamos solas en el mundo, con fuertes deudas y un gran pleito.

Mucho trabajó durante los dieciocho años que separan el de 1631, en que de vuelta en Madrid aparece su nombre en las nóminas de palacio por el mes de Enero, y el de 1649 en que emprendió su segundo viaje a Italia: mas no hay modo de enumerar por orden riguroso todo lo que pintó.

Durante los últimos dieciocho años cierta corporación ha extraído un millón de toneladas, no siendo éstas más que la tercera parte de lo que se le ha concedido por contrato. Los principales productos vegetales del Perú son la caña de azúcar, el algodón y el arroz. Las mejores clases de algodón se cultivan cerca de Piura y son embarcadas en Paita.

Una chica guapa que se había dejado atrapar. ¡Bonito estaría que don Juan de Todellas se desvelase por tan poco! Caída... seducción... engaño... palabrería ridícula. Pasados los dieciocho años ella no es nunca seducida, sino seductora. A pesar de todas estas reflexiones, el pobre hombre pasó la noche pensando en Cristeta como colegial enamorado de la hermanita de un compañero. <tb>

Tuvo mamá en un tiempo la ilusión ¡qué tontería!, de casarme con él. Yo tenía dieciocho años, él treinta y pico. ¿Te vas enterando? Fortunata atendía con toda su alma. «¿Quieres que te hable con franqueza?

La figura enorme de Balzac, que á pesar de hallarse en la ubérrima y gloriosa plenitud de su labor, necesitaba escribir diecisiete y dieciocho horas diarias para pagar sus deudas, es prueba concluyente de que raras veces el libro produce lo necesario para vivir holgadamente.

35 En derredor [tendrá] dieciocho mil [cañas]. Y el nombre de la ciudad desde aquel día será EL SE