United States or Niue ? Vote for the TOP Country of the Week !


Yo ni siquiera concibo a Vd. sin Vd. Para es Vd. su boca, sus ojos, sus negros cabellos, que deseo acariciar con mis manos, su dulce voz y el regalado acento de sus palabras que hieren y encantan materialmente mis oídos, toda su forma corporal, en suma, que me enamora y seduce, y al través de la cual, y sólo al través de la cual se me muestra el espíritu invisible, vago y lleno de misterios.

Jamás te arrojaré en cara falta de energía, ni desfallecimiento de constancia. ¡Es tan natural que me olvides! Harto has hecho con empezar a quererme, aunque luego te pese. ¿Cuántas veces te habré dicho todo esto? No te sorprenda, porque obedece a mi idea fija, a mi cavilación constante. Vamos, no concibo el fundamento de tu amor. Yo te amo por lo buena, por lo hermosísima que eres.

Concibo perfectamente por qué los sacerdotes quieren una sumisión ciega y predican tan ardientemente esta fe religiosa que adopta sin examen y adora sin murmurio; ello es la base de su imperio; y éste está perdido desde que se razona".

Un poco más adelante volvió a hablar la sevillanita, para decir a Leto, también en crudo, pero sin detenerse: Es una compasión que no sea usted tan aficionado a pintar al óleo como a la aguada. Ya le he dicho a usted en otra ocasión respondió Leto , que eso consiste en mi falta de paciencia: todo tiempo, por corto que sea, desde que concibo algo hasta que lo ejecuto, me parece una eternidad.

No negaré que Julio es entre los hombres de su clase, una excepción muy digna de estima; pero ya le he dicho a usted en más de una ocasión, que no tengo otro deseo que quedarme a su lado, viviendo en su compañía, mientras usted lo permita. Ni concibo ni quiero otra felicidad, y si usted no dispone otra cosa, ésa es la que yo elijo.

Cuando nos falta el primero, somos malos; cuando el segundo, somos desgraciados. El resultado doloroso, es pena, si nuestra voluntad ha infringido á sabiendas el órden; cuando , es simplemente desdicha. He necesitado de la idea de Dios, es cierto; porque no concibo órden moral, en quitando á Dios del mundo.

Y es que procuro explicarle, para que usted no interprete mal. Si no concibo ahora su pasión, si me parece un desatino, es porque yo me engañé y pienso que usted se ha engañado también. Yo tengo la culpa, ya .

Volví a ver los hombres de nuevo, grandes como no son; y abrí los ojos buscando mi cicerone. No vi nada, sino el gran cuasi por todas partes. Es cosa generalmente reconocida que el hombre es animal social, y yo, que no concibo que las cosas puedan ser sino del modo que son; yo, que no creo que pueda suceder sino lo que sucede, no trato por consiguiente de negarlo.

Para que los dos seamos uno solo, me falta muy poco; sólo me falta verte y recrearme en tu belleza, con ese placer de la vista que no puedo comprender aún, pero que concibo de una manera vaga. Tengo la curiosidad del espíritu, pero la de los ojos me falta. Supóngola como una nueva manera del amor que te tengo. Yo estoy lleno de tu belleza; pero hay algo en ella que no me pertenece todavía.

Como le escribía esas cartas y como después me mostraba tan insensible y tan rara, usted mismo se avivó una pasión que tal vez no hubiera nacido nunca o se hubiera apagado pronto si yo me hubiese mostrado más sencilla, más vulgar, como realmente lo soy. No concibo tampoco que usted pueda quererme; se ha enamorado de una ficción, de un fantasma.