Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 6 de junio de 2025


iManfredo! iAh! prosigue por favor: esta voz me reanima; es la tuya seguramente. iManfredo! manana se acabaran tus dolores terrestres. iA Dios! Todavia una palabra iuna sola palabra! ?estoy perdonado? iA Dios! ?No nos veremos mas? iA Dios! iAh! por compasion, todavia una palabra; dime si me amas. iManfredo! Se ha ido y no volvera a aparecer: sus palabras se cumpliran; vuelvete a la tierra.

17 Hasta que apunte el día, y huyan las sombras, vuélvete, amado mío; semejante al gamo, o al cabrito de los ciervos, sobre los montes de Beter. 2 Me levantaré ahora, y rodearé por la ciudad; por las calles y por las plazas buscaré al que ama mi alma; lo busqué, y no lo hallé. 3 Me hallaron los guardas que rondan la ciudad, y les dije: ¿Habéis visto al que ama mi alma?

La condesa tornó á bajar la escalera de mano, ayudada por Pedro, y juntos atravesaron el prado, descendieron por el bosque de castaños y penetraron en la pomarada, abriendo la puerta de madera. Á los pocos pasos Laura distinguió á lo lejos entre el follaje á su marido, acompañado de Octavio. Vuélvete, Pedro, que ya no me haces falta se apresuró á decir.

Vuélvete acá... ¿Qué es de ? ¿Qué me aconsejas? ¿Qué me dices?... ¡Qué ganas siento de llorar! Sola, sin nadie que me diga una palabra de consuelo... ¡Oh!, ¡qué amiga me he perdido!... Mauricia, no estés más entre las ánimas benditas, y vuelve a vivir... Mira que estoy huérfana, y yo y los huerfanitos de tu asilo estamos llorando por ti... Los pobres que socorrías te llaman.

8 Si él decía así: Los pintados serán tu salario; entonces todas las ovejas parían pintados; y si decía así: Los cinchados serán tu salario; entonces todas las ovejas parían cinchados. 9 Y quitó Dios el ganado de vuestro padre, y me lo dio a . 11 Y me dijo el ángel de Dios en sueños: Jacob. Levántate ahora, y sal de esta tierra, y vuélvete a la tierra de tu naturaleza.

Tu eres loco, y si lo fueras a solas y dentro de las puertas de tu locura, fuera menos mal; pero tienes propiedad de volver locos y mentecatos a cuantos te tratan y comunican; si no, mírenlo por estos señores que te acompañan. Vuélvete, mentecato, a tu casa, y mira por tu hacienda, por tu mujer y tus hijos, y déjate destas vaciedades que te carcomen el seso y te desnatan el entendimiento.

Has de saber, Anita mía, que yo tengo para ti un novio, paisano mío. Vuélvete a casa, que allá iré yo y te hablaré del asunto. Aquí sería una profanación. El candidato de Ripamilán era un magistrado, natural de Zaragoza, joven para oidor y algo maduro, aunque no mucho, para novio. Tenía entonces la señorita doña Ana Ozores diez y nueve años y el señor don Víctor Quintanar pasaba de los cuarenta.

Salió de su sueño y brincó del carruaje al suelo. Ahora vuélvete por la familia le dijo a Ramón, y no digas que me has traído. No hay necesidad de asustarles. Se dirigió lentamente hacia la puerta del parque, que estaba a unos doscientos pasos, mientras el coche se alejaba en sentido contrario. Cuando llegó, la tocó con mano trémula. Estaba abierta como la otra vez.

13 Y tomaron prestamente cada uno su ropa, y la puso debajo de él en un trono alto, y tocaron trompeta, y dijeron: Jehú es rey. 14 Así conjuró Jehú hijo de Josafat hijo de Nimsi, contra Joram. Y Jehú dijo: Si es vuestra voluntad, ninguno escape de la ciudad, para ir a dar las nuevas en Jezreel. 16 Entonces Jehú cabalgó, y se fue a Jezreel, porque Joram estaba allí enfermo. Vuélvete tras .

Pero ya mi mujer se está cansando del tocino y la sopa. Yo no, yo no me canso, señora maga. Pero mi mujer se ha cansado, y quiere algo ligero, así como un gansito asado, así como unos pastelitos. Pues vuélvete a tu casa, leñador, y no tienes que venir cuando tu mujer quiera cambiar de comida, sino pedírselo a la mesa, que yo le mandaré a la mesa que se lo sirva.

Palabra del Dia

ayudantes

Otros Mirando