Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 10 de junio de 2025
¿Veis? gritó mostrando el puño . Todo el mundo lo dice.... ¡Han envenenado las aguas! Inquieto, feroz y pequeño, Timoteo tenía todas las apariencias del chacal, la mirada baja y traidora, los músculos ágiles, el golpe certero. Atacaba de salto. Era el mismo a quien vimos haciendo buñuelos en la tienda inmediata a la gran carnecería de la Pimentosa, de quien era protegido, lo mismo que su mujer.
Una contrariedad de otro orden vino a perturbar momentáneamente el curso de estas indagaciones. El matrimonio de su hija Presentación iba a llevarse pronto a efecto. Timoteo entraba a todas horas del día en la casa y era considerado ya como un hijo más. Se hacía el equipo, se amueblaba un cuarto en sitio próximo, se arreglaban los papeles.
Cualquiera me hubiera hecho sentar; pero don Timoteo me recibió en pie, atendida, sin duda, la diferencia que hay entre el literato y el hombre.
Formáronse dos grupos a respetable distancia el uno del otro. Y donde todo era antes alegría y expansión reinó súbito silencio lúgubre y amenazador. Los de un grupo trataban confidencialmente de convencer a Grass de que no era sensato ofenderse por las palabras de un badulaque como Timoteo.
Y aunque todas le servían con agrado y diligencia, se distinguía particularmente por su entusiasmo Presentación. ¡Las diabluras que aquel hombre festivo llevó a cabo con ella, sacándole monedas del pelo, de las narices, del cuello!... ¡Timoteo ansiaba beber su sangre! A las once, poco más o menos, hizo su entrada triunfal en el Vivero la familia del presidente de la Liga de Productores.
19 Mas espero en el Señor Jesús enviaros pronto a Timoteo, para que yo también esté de buen ánimo, entendido vuestro estado. 20 Porque a ninguno tengo tan unánime, y que con sincera afición esté solícito por vosotros. 21 Porque todos buscan lo que es suyo propio, no lo que es de Cristo Jesús. 24 y confío en el Señor que yo también iré pronto a vosotros.
Carlota la contemplaba con sonrisa benévola y le decía por lo bajo: ¡Calma, niña, calma! ¡Sí, sí, calma!... ¡Que te pasase a ti lo que a mí me está pasando! exclamaba con coraje, esforzándose en apagar la voz. Buenas noches, Carlotita dijo en aquel momento Timoteo, tratando de dar a su voz gangosa acento picaresco. No se las he dado antes porque la veía a usted muy entretenida.
Buenas noches, D.ª Carolina. Buenas noches, D. Pantaleón. Buenas noches, Presentacioncita. Era horrible. Presentación le deseaba de todas veras la muerte. La actitud de Timoteo respecto a Godofredo, su aborrecido rival, estaba llena de calma y desdén. La mayor parte de las veces cuando se acercaba a la mesa no le daba las buenas noches ni le dirigía siquiera una mirada.
Se mostró ante los ojos húmedos de Timoteo, no con la apariencia desagradable que hasta entonces se había visto precisada a adoptar, sino como lo que era en realidad, un tesoro de indulgencia y generosidad. Media hora de conversación íntima bastó para que Timoteo se viese tratado con la confianza y cariño de un hijo mimado.
Presentación no respondía. Sin embargo, la imagen expresiva de la bandera y de la gota de sangre debieron de enternecer un poco su corazón. Al cabo de un rato repitió por máquina y con menos fuerza: Que se vaya... que se vaya. Presentacioncita aulló de nuevo Timoteo, ¡quisiera morir por usted!
Palabra del Dia
Otros Mirando