Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 17 de junio de 2025


Zumbaban los insectos sobre las inquietas crestas de la maleza; arrastrábanse los lagartos entre las piedras; sonaban a lo lejos las esquilas con acompañamiento de balidos, y de vez en cuando, al trotar el caballo de Rafael por unos caminos que nunca habían conocido la rueda, abríase en lo alto de un ribazo la cortina de matorrales, asomando los cuernos y el hocico babeante de una vaca o el testuz curioso de un ternero que parecía extrañar la presencia de un hombre que no fuese el pastor.

Barbarita abría cada ojo como los de un ternero cuando su mamá, sentándola sobre el mostrador, le enseñaba abanicos sin dejárselos tocar; y se embebecía contemplando aquellas figuras tan monas, que no le parecían personas, sino chinos, con las caras redondas y tersas como hojitas de rosa, todos ellos risueños y estúpidos, pero muy lindos, lo mismo que aquellas casas abiertas por todos lados y aquellos árboles que parecían matitas de albahaca... ¡Y pensar que los árboles eran el nada menos, estas hojuelas retorcidas, cuyo zumo se toma para el dolor de barriga...!

226 ¡Ah, gaucho!, Me respondió; ¿de que pago será crioyo? ¿Lo andará buscando el hoyo? Deberá tener güen cuero; pero ande bala este toro no bala ningún ternero. 227 Y ya salimos trenzaos porque el hombre no era lerdo, mas como el tino no pierdo, y soy medio ligerón, le dejé mostrando el sebo de un revés con el facón.

Ni poncho con que taparnos. 658 Dichoso aquel que no sabe lo que es vivir sin amparo; yo con verdá les declaro, aunque es por demás sabido, dende chiquito he vivido en el mayor desmparo. 659 No le mermam el rigor los mesmos que le socorren; tal vez porque no se borren los decretos del destino, de todas parten lo corren como ternero dañino.

El Comandante General nombró á D. Antonio Ternero, Sargento Mayor del regimiento del Cuzco, para que con 80 fusileros subiese á castigar su atrevimiento: lo que egecutó este oficial bizarramente, matando doce rebeldes, y quitándoles algunos caballos y mucho ganado lanar que condujo al campo; y poco despues se supo por cuatro prisioneros, que los vecinos del pueblo de Santa Rosa eran los mas afectuosos distinguidos parciales de las glorias de Tupac-Amaru, y que le habian acompañado en sus mas árduas empresas, con lo que determinó el General castigarlos, y para este intento se puso en marcha para dicho pueblo.

Este ternero lo has traído de la Inclusa para engarnos... ¡Ah!, estos proteccionistas no son más que contrabandistas disfrazados». Criáronle con regalo y exquisitos cuidados, pero sin mimo. D. Baldomero no tenía carácter para poner un freno a su estrepitoso cariño paternal, ni para meterse en severidades de educación y formar al chico como le formaron a él.

Y mientras se hacen éstos ó parecidos comentarios entre la gente, va pasando la cabaña y entrando en el gran cercado, hasta que llegan, cerrando la marcha, el toro, los terneritos, los perros y los pastores: el toro con sus ojeras blancas sobre una cara negra y lustrosa como el terciopelo, ondeando con cierta vanidad la piel, que casi le arrastra, de su robusto cuello; los becerritos con su pelo rizoso y bermejo y su carita expresiva, pisando con miedo, y rendidos de cansancio; los perros con su piel blanca con manchas negras, andando al pie de los terneros y mirando á todas partes con un gestecillo que parece decir: «al que los toque en el pelo, nos le merendamos»; por último, los pastores con abarcas de tarugos, garrote nudoso, y al hombro, además del morral y la chaqueta, un ternero recién nacido, que nunca suele faltar.

Decir que estos manjares elegidos no le hicieron efecto, sería negar la evidencia y blasfemar de las comidas regaladas. M. L'Ambert adquirió en poco tiempo hermosos mofletes rojos, un pescuezo muy digno de cualquier ternero apoplético y una respetable panza. Pero la nariz parecía una especie de socio negligente o desinteresado, que no se ocupa en cobrar sus dividendos.

Palabra del Dia

aconséjele

Otros Mirando