United States or Nigeria ? Vote for the TOP Country of the Week !


Y el excelente hombre, un poco desconcertado, se desgreñaba el pelo con energía, lo que daba a su cabeza el aspecto de la de un lobo, polvoreada de blanco. Haces mal en discutir tanto, hijita mía decíame algunas veces; es un pecado de orgullo. No seré siempre yo quien te conteste, y cuando estés en lucha con la vida sabrás que no se discute con ella, sino que se la sufre.

Seré su mujer, Cristián, cuando pueda usted casarse conmigo con la aprobación de todo el mundo. Esté usted tranquila, María, y usted también, señora; ese momento no se hará esperar. Todos eran felices y Marenval saltaba de gozo, atribuyéndose toda aquella alegría. El tiempo pasaba rápido y ya declinaba la tarde cuando la madre y la hija se decidieron á dejar á Jacobo.

El otro joven oía con mucha atención aquel relato, hecho con toda la veracidad posible. Yo seré franco, y no ocultaré á usted mis sentimientos, mis primeras intenciones continuó para que pueda usted juzgarme mejor.

26 Y os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré corazón de carne. 27 Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis mandamientos, y guardéis mis derechos, y los pongáis por obra. 28 Y habitaréis en la tierra que di a vuestros padres; y vosotros me seréis por pueblo, y yo seré a vosotros por Dios.

Me volveré de este otro lado... »El tal marqués viudo de Saldeoro está loco por ; pero no seré tonta, no le daré a conocer que me gusta... ¡Y cómo me gusta!... En fin, suspiremos y esperemos. Conviene tener dignidad. ¿Soy acaso como esas cursis que se enamoran del primero que llega? No, en mi clase no se rinde el corazón sin defenderse. Firmeza, mujer.

»Adiós, llave de los corazones. El mío le está abierto desde hace mucho tiempo, y si no es usted el mejor de mis amigos, no es mía la culpa. Consérveme mi marido y mi hijo y seré siempre completamente suya. Los oficiales de la «Náyade» a la señora Chermidy «Hong-Kong, 2 de abril 1853.

EVARISTA. ¿Y ello ha de ser pronto? PANTOJA. Al instante... EVARISTA. Bien. PANTOJA. Mande usted la carta sin pérdida de tiempo. Paréceme que ya vienen... PANTOJA. Pronto, amiga mía. EVARISTA. Ya voy... Dios nos inspire a todos. PANTOJA. Seré con usted. PANTOJA, oculto; ELECTRA, DON URBANO, el MARQU

Lacante tomó una expresión de cólera. ¿Quién habla de eso? exclamó golpeando en la mesa con la regla. ¿He dicho yo semejante cosa?... Mi hija irá al convento, que es el sitio más propio para mantenerla en las ideas que se le han inculcado... Y no seré yo el que trate... No diga usted tonterías, amigo.

16 Por tanto di: Así dijo el Señor DIOS: Aunque los he echado lejos entre los gentiles, y los he esparcido por las tierras, con todo eso les seré por un pequeño santuario en las tierras adonde llegaren. 18 Y vendrán allá, y quitarán de ella todas sus contaminaciones, y todas sus abominaciones.

Porque vosotros sois el templo del Dios Viviente, como Dios dijo: Habitaré y andaré en ellos; y seré el Dios de ellos, y ellos serán mi pueblo. 17 Por lo cual, salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor, y no toquéis cosa inmunda; y yo os recibiré, 18 y seré a vosotros Padre, y vosotros me seréis a hijos e hijas, dice el Señor Todopoderoso.