Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 22 de junio de 2025


Fingimos indiferencia, fingimos que andamos enamorándonos de otro... Y yo le explicaré, para que todo se aclare. No, no me interrumpa, aguarde un poco, por favor. Los otros días, cuando lloré, usted hubiera debido adivinar que comencé llorando como fingimiento, para concluir llorando por la idea de que no podía dejar de hacerle sufrir... Me dominaba el espíritu de la perversidad.

Me lancé hacia ella y lloré sobre su hombro, apretando convulsivamente el plato con la mano izquierda. ¿Qué tienes, querida? me preguntó acariciándome. En toda la casa eras la única que conservabas tu buen humor, y ahora... Me armé de valor y, acercándola a la luz, le mostré el plato.

El artista, loco de contento, quería comunicárselo al atribulado padre, y medio se echó de la cama para decirle: «D. Francisco, no llore, que el chico vive.... Me lo dice el corazón, me lo dice una voz secreta.... Viviremos todos y seremos felices. ¡Ay, hijo de mi alma! exclamó el Peor; y abrazándole otra vez: Dios le oiga á usted. ¡Qué consuelo tan grande me da!

Yo no le dejaba; lloré, supliqué. Pero él, con esa gravedad tan suya, me dijo: «Primero está el deber, Petrona». Siempre ha sido lo más esclavo del deber. Y se fué. Sufrí un síncope, y, cuando se me pasó, la figura de mi novio se me agigantó en el espíritu con proporciones napoleónicas. El amor es un cristal de aumento. Luego Eleuterio abandonó el partido.

No faltó quien dijo que lloraba el vino que había bebido; pero estamos lejos de dar crédito a esta insinuación malévola, primeramente porque es un absurdo que se llore vino, y después porque su acento era tan sincero, su ademán tan patético, que nadie podía dudar de que sus palabras salían del fondo del corazón.

¡Eso no es posible, no sucederá!... Ella movió la cabeza. ¡No digas que no! insistí. ¡No digas que no!... Ya que no me amas, que me odias, que me execras; pero no me digas, que amas a otro, porque... porque... Le amo dijo. Entonces la supliqué, hasta lloré. Ella repitió: Le amo. No se debe mentir. Yo no fingir. Le amo; y porque este amor me está vedado, muero.

También Blanca y el viejo Lope de Urrea acuden presurosos á la cárcel; sordos gemidos y lamentos salen de ésta; las puertas se abren, y se ve á Don Lope estrangulado, y teniendo en sus manos un papel con la sentencia siguiente: Quien al que tuvo por padre Ofende, agravia é injuria, Muera, y véale morir Quien un limpio honor deslustra, Para que llore su muerte También quien de engaños usa, Juntando de tres delitos Las tres justicias en una.

Sus manazas la ayudaron á levantarse, sin que ella repitiese la protesta que había repetido á Tòni. Vencida y derramando lágrimas, pareció someterse á la ayuda paternal y los consejos del cocinero. ¡Arriba, buena señora! dijo Caragòl . Un poco de ánimo y no llore... Para todo hay consuelo en este mundo.

Allí se me representaron de nuevo mis fatigas, y torné a llorar mis trabajos; allí se me vino a la memoria la consideración que hacía cuando me pensaba ir del clérigo, diciendo que aunque aquél era desventurado y mísero, por ventura toparía con otro peor: finalmente, allí lloré mi trabajosa vida pasada y mi cercana muerte venidera.

37 Y volvió a decir a su padre: Concédeme esto: déjame por dos meses que vaya y descienda por los montes, y llore mi virginidad, yo y mis compañeras. 38 El entonces dijo: Ve. Y la dejó por dos meses. Y ella fue con sus compañeras, y lloró su virginidad por los montes. Y ella nunca conoció varón.

Palabra del Dia

vorsado

Otros Mirando