United States or Comoros ? Vote for the TOP Country of the Week !


Cierto que el zafio de Roberto no tardó en quedarse sin blanca, gracias á una mozuela francesa, linda como una perla y más lista que una ardilla. Pero esas son cuentas suyas, y además ¿no se han hecho las doblas para gastarlas, sobre todo en compañía de un buen palmito? ¿Verdad, ma belle?

Allá va, pues, la lista aunque no me la agradezca nadie: Barcenaciones, Bustablado, Cerrazo, Cohicillos, Cóo, Helguera, La Busta, La Montaña, Los Corrales, Llano, Mercadal, Novales, Oreña, Polanco, Quijas, Reocín, Rudagüera, Ruiloba, San Mateo, Somahoz, Tanos, Tarriba, Toporias, Treceño, Udías, Valle, Valle de Cabezón, Viérnoles, Vioño y Zurita.

El miembro del tribunal que se encontraba a la izquierda del presidente le dijo por lo bajo: ¿Por qué no les pregunta usted a las demás mujeres? ¿Acaso tampoco querrán prestar juramento? El presidente tomó la lista de testigos y leyó: ¡Pustochkina! Usted también, a lo que parece, se ocupa...

Los periódicos publicaron largas columnas con la lista de los objetos como si se tratase de una liquidación. «Señores de L *: neceser de viaje en piel de Rusia guarnecido de plata. Señor de C *: juego de tocador en cristal de Bohemia. Marqueses de H *: bandeja de plata repujada.

Es lo primero que he puesto en la lista de encargos que dejo a Enríquez, y para que no se le olvide, siempre que le veo machaco en lo mismo. «Cuidado cómo deja usted de entregar... cuidado, Enríquez... El pico de mi amiga es lo primero». Muy mal le supo a esta tal dilación; pero como la promesa parecía tan solemne y no era mucho esperar al 5 de Agosto, hubo de tranquilizarse.

No le duró mucho la incertidumbre: su hermana le llamó presto para levantar a don José; y como éste le preguntara por la madre, Leocadia dijo que había ido a la iglesia. Aunque me lo ocultéis repuso Pepe veo que aquí anda la mano de Tirso. No , pero, hazte cargo; estando él aquí, parece feo que nadie oiga misa. Eres lista y comprenderás mi temor.

Ahora me va a decir a el señor a dónde va, cuando sale. Pues es muy raro... Pero, en fin, si vino, a usted le diría... ¿A qué había de decirme, si no le he visto?... Déjame que te explique. A las diez bajó a hacerme compañía, como acostumbra, una de las chiquillas de la cordonera, la mayor, Celedonia, que es más lista que la pólvora.

Y mandaron se imprima en el dia y se reparta sin pérdida de instantes, arreglándose lista de los individuos, en la que deberán ser comprendidos el Reverendo Obispo, el Exmo. Sr.

Aquí comenzaron algunos de nuevo á quejarse del Visorrey, diciendo que no hacía caso de nadie ni llamaba á Consejo los Oficiales de S. M., que eran diputados para ello, y muchos señores y caballeros que venían á servir, por lo que comenzaban á suceder mal algunas cosas, y ansí acordaron pedir lista de la gente que había á los Capitanes de los soldados que cada uno tenía, porque se dijo que había muchos enfermos.

No, ciertamente: yo no hablo con nadie más que con las personas cuya lista da el duque de Lerma á la duquesa de Gandía. Os engañáis, porque habláis todos los días y á todas horas con una persona á quien no pueden ver ni la duquesa ni el duque. ¿Y quién es esa persona? Esa persona es vuestra favorita... la hermosa menina doña Clara Soldevilla.