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Para concluir, y en pro de este tipo tan popular en Santander, haré una ligera observación: de vástagos tan carcomidos y tortuosos son muy frecuentes aquí robustos y fructíferos troncos.

Elena, también confusa, le explicó que había llegado hacía pocos días para reponerse de una ligera fiebre que había padecido y le suplicó que le preparase una poción calmante para dormir que en otro tiempo, cuando vivía en el Escorial, le había probado muy bien. Vilches se apresuró a complacerla. Mientras duró la confección charlaron.

Mas luégo vuelve ligera cruzando la azul esfera, de amor su sér todo henchido, á buscar el mismo nido al volver la primavera. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ; cuando de gozo henchido oiga el canto bendecido de vuestra voz hechicera, será tambien primavera para nuestro pobre nido.

Ya en la cuarta misa, el caballero aquel, no sólo se distraía sino que perturbaba la devoción de los fieles, pasando delante de los altares, donde se decía misa, sin hacer la más ligera genuflexión ni reverencia. «Tendré que decirle que se vaya pensaba la santa . Esa no es manera de estar en la iglesia».

»Prometióselo Lotario, y, en apartándose dél, se arrepintió totalmente de cuanto le había dicho, viendo cuán neciamente había andado, pues pudiera él vengarse de Camila, y no por camino tan cruel y tan deshonrado. Maldecía su entendimiento, afeaba su ligera determinación, y no sabía qué medio tomarse para deshacer lo hecho, o para dalle alguna razonable salida.

En la mayor parte de los casos de gastropatía, se puede tener presente, que si la nuez vómica es ineficaz, la manzanilla aliviará, aun cuando sea otro el medicamento indicado para la curacion. =Dósis.= Se curará á veces con una ligera infusion de un puñado de la planta seca, que es preciso no confundir con la manzanilla romana.

Bajo sus reinados acontecen la solemne embajada del Gorziense, aquellas legacías y comisiones de prelados, como las de los obispos Ermenhardo, Juan, Recemundo, Dudo, etc., entre los califas y los emperadores de Alemania y Constantinopla, en que el arte y sus bellezas figuran tanto; aquellos agasajos contínuos entre infieles y cristianos, en que se comercia por una parte con las santas reliquias de los mártires, haciendo alarde de civilidad y tolerancia; aquel incesante acudir de los cristianos á la corte de los califas, á la nueva Atenas, buscando la salud , buscando alianzas y proteccion , buscando la luz de las ciencias y de las artes ; aquel interminable despuntar de genios en todos los ramos del humano saber, á quienes aun hoy el mundo venera: hechos todos de que hemos dado ligera noticia al lector en el discurso del capítulo precedente.

Y , sol, que ya debes de estar apriesa ensillando tus caballos, por madrugar y salir a ver a mi señora, así como la veas, suplícote que de mi parte la saludes; pero guárdate que al verla y saludarla no le des paz en el rostro, que tendré más celos de ti que los tuviste de aquella ligera ingrata que tanto te hizo sudar y correr por los llanos de Tesalia, o por las riberas de Peneo, que no me acuerdo bien por dónde corriste entonces celoso y enamorado.

Perdona si mis palabras te han ofendido. Fernanda hizo una mueca de desdén y se alejó exclamando: ¡Arrepiéntete, pecador, que el infierno tienes delante! ¡El infierno! Esta palabra, soltada a la ligera, como broma, hizo dar un vuelco a su corazón; despertó la preocupación constante de su existencia desde hacía algún tiempo. Todos los Gayoso habían vivido bajo la influencia de esta idea funesta.

Ya lo verás respondió él; yo en esto nada entiendo. ¡Me parece tan débil, tan frágil! Me digo que será un milagro si se salva. Pero el médico pretende que va bien, y lo que es él debe saberlo. ¿Y el niño? pregunté en seguida. Rió con una ligera risa interior que llegó hasta en el crepúsculo. ¡El niño, hum, el niño!...