Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 8 de junio de 2025
Pedro de Alvarado tenía que luchar contra los conjuros de una india gorda, temible hechicera igual a las encantadoras de los poemas antiguos. En un combate mataba de una lanzada a un águila verde que pretendía sacarle los ojos, y al caer, el ave de presa tomaba la forma de un indio muerto.
Sigue a esto dijo a su padre Maravillas, interrumpiendo la lectura , un largo párrafo muy bonito y de gran efecto, de conjuros y de apóstrofes por el estilo de los que ha oído usted, que duran hasta la mitad de esta segunda columna, y digo enseguida... «¿Sabes por qué eres andrajosa, y fea y esclava vil y degradada, ¡oh, Villavieja infelice?
A mí no me es concedido dijo el Espíritu , y a ti sí, por ser hombre con el privilegio del baptismo y libre del poder de los conjuros, con quien han hecho pacto los príncipes de la Guinea infernal . Toma un cuadrante de esos y haz pedazos esta redoma; que luego en derramándome me verás visible y palpable.
Pero tú has llegado a tiempo que me puedes rescatar, porque este a cuyos conjuros estoy asistiendo me tiene ocioso, sin emplearme en nada, siendo yo el espíritu más travieso del infierno. Don Cleofás, espumando valor, prerrogativa de estudiante de Alcalá, le dijo: ¿Eres demonio plebeyo, u de los de nombre? Y de gran nombre le repitió el vidro endemoniado , y el más celebrado en entrambos mundos.
Si La Cueva hubiese siempre imitado á sus modelos, se hubiera también abstenido de los extravíos á que lo arrastraba su propia imaginación, y siempre apareciera bajo un aspecto más favorable, que aquél con que se muestra el dios Marte á la conclusión de su Bernardo del Carpio, cuando pronuncia la apología del héroe y lo ciñe con el laurel de la victoria, ó cuando en sus Siete infantes de Lara recurre de nuevo á sus amados conjuros diabólicos.
Hasta el mismo Faraón, si tenía el antojo de hacer algún milagro valiéndose de las tales fórmulas, se exponía á que el cielo le castigase enviando á su reino las más espantosas plagas. Así, pues, los conjuros demóticos que en la colección se ven, deben de ser una divulgación sacrilega, plebeya é incompleta, de la alta y noble ciencia de los sacerdotes y príncipes.
Entre las diversas figuras que surgen alternativamente, encuéntrase también la Virtud, que intenta arrancar á Ulises de los brazos de la encantadora; Circe hace nuevos conjuros, y evoca terribles apariciones para ahuyentar á su enemigo; pero ésta obtiene al cabo el triunfo, y al caer Ulises en sus brazos, el encanto se desvanece, el palacio con sus habitantes se hunde por un terremoto, y los encantados recobran sus primitivas formas.
Inviala, qué esperas? Esperas á que hable con mas veras? No revolveis la piedra, desleales? Decid, ministros falsos, qué os detiene? Cómo? no me haveis dado ya señales De que haceis lo que digo, y me conviene? Buscais con deteneros vuestros males, O gustais de que yo al momento ordene De poner en efecto los conjuros Que ablandan vuestros fieros pechos duros?
Bien hubiera querido el Kan que este encanto fuera indestructible y eterno, mas no pudo lograrlo a pesar de sus maravillosos conocimientos en la magia. El rey de los genios se opuso a su mal deseo, y si bien no pudo hacer completamente ineficaces sus encantamentos y conjuros, supo despojarlos de gran parte de su malicia.
Otras leyendas dicen cómo y á qué hora hay que golpear la piedra sagrada que tapa las riquezas, qué señales hay que hacer, qué extrañas sílabas hay que pronunciar. Pero si algo se olvida, si en vez de un sonido se oye otro, todos los conjuros son ineficaces.
Palabra del Dia
Otros Mirando