United States or Senegal ? Vote for the TOP Country of the Week !


En esta plaza de agua metida entre casas habían anclado sus pobres naves los primeros fenicios, viéndose sucedidos por los emigrantes de Focea en Asia Menor, marineros griegos que huían de la invasión de los persas. Las colinas calcáreas y desnudas inmediatas al puerto se cubrían de viviendas, y así nació Marsalia, que había de ser siglos adelante la señora del Mediterráneo.

Otras cimas más humildes, enseñan en las inmediaciones sus largas crestas como dientes de sierra gigantesca en rápidos declives: son asientos esquistosos que el cono central de granito ha formado al levantarse. Más lejos aparecen alturas calcáreas, cortadas verticalmente y se continúan por vastas mesetas ligeramente redondeadas.

Esta escena muda, que fue brevísima, acabó por echar Pito el sombrero al aire, es decir, por estrellarle contra la bóveda erizada de puntas calcáreas; Chisco hizo lo propio, y yo no quise ser menos que los dos.

De otra parte, las estalactitas, como todas las cosas de la naturaleza, varían hasta el infinito, según la forma de la gruta, la disposición de las fisuras y la más ó menos cantidad de gotas que depositan las revocaciones calcáreas. A pesar de las obscuras tinieblas que las llenan, infinidad de cavernas se han cambiado así en maravillosos palacios subterráneos.

Estos bosques surgían como manchas de vida allí donde el encuentro de las corrientes superficiales hacía llover un maná de diminutos cadáveres. Las plantas retorcidas y calcáreas, duras como la piedra, no eran plantas: eran animales. Sus hojas, tentáculos inertes y traidores, se encogían de pronto. Sus flores, bocas ávidas, se inclinaban sobre la presa, sorbiéndola por sus ventosas glotonas.

Todos los objetos adquieren formas fantásticas: cualquier orificio practicado en la roca se nos antoja un abismo; la convexidad insignificante que aparece en la regularidad de la bóveda adquiere las proporciones de un monte derribado; las concreciones calcáreas entrevistas aquí y allá toman el aspecto de monstruos enormes; un murciélago que vuela, cualquier cosa que se desprende, nos produce un extremecimiento de horror.

Lo mismo que árboles de piedra, los estalactitas crecen por capas concéntricas endureciéndose poco á poco. Bajo ellas, en el suelo de la gruta, el agua caída se evapora igualmente y deja en su puesto otras concreciones calcáreas, que, de hoja en hoja, se levantan por grados hacia la bóveda.

Los crustáceos viven metidos en corazas ó aprovechan como refugio las envolturas calcáreas, expulsando á sus dueños; los animales-plantas expelen toxinas; los seres planctónicos, transparentes y gelatinosos, queman como un cristal puesto al fuego; algunos organismos en apariencia débiles y blanduchos tienen en su cola la fuerza del berbiquí, perforando la roca hasta crearse una caverna de refugio en sus duras entrañas... Y los tímidos moluscos, de carne dulce y temblona, se habían fabricado los fuertes escudos de sus valvas, dos murallas cóncavas que al abrirse son puerta y al cerrarse son casa.

Como símbolo del tiempo que todo lo modifica, la gota, cargada de la piedra que ha disuelto, hace desaparecer lentamente las huellas de nuestros crímenes. Hasta las grutas dejan de existir por la acción del tiempo. La lluvia que cae sobre el monte y penetra en las fisuras de la piedra, se carga constantemente de moléculas calcáreas.

Luego permanecían inmóviles, filtrando el agua por las celdas y corredores de sus tejidos, protegiendo su carne suave con un erizamiento de espículas, agujas calcáreas y picantes, con las que ensartaban é inmovilizaban á los peces, sirviéndolas de alimento sus residuos en putrefacción.