United States or Cambodia ? Vote for the TOP Country of the Week !


Después, entre Juanita la lañadora, las niñas de al lado y yo, cogimos una cómoda, y echándola a la calle aplastamos a dos. Querían subir a matarnos; pero ¡quía! Todo facha, nada más que facha. Más de cuarenta mujeres nos apostamos en la escalera, unas con tenedores, otras con tenacillas, estas con asadores, aquella con un berbiquí, estotra con una vara de apalear lana.

Luego avanzó la diestra audazmente, y á pesar de su deseo de mantenerse silencioso, lanzó un rugido. ¡Ah, pájaro del diablo!... Tenía un dedo atravesado de parte á parte. No era un picotazo; era una puñalada. Un berbiquí ardiente acababa de perforarle la carne y el hueso. Sobreponiéndose al dolor, cerró la mano ensangrentada para aprisionar á su enemigo.

Los crustáceos viven metidos en corazas ó aprovechan como refugio las envolturas calcáreas, expulsando á sus dueños; los animales-plantas expelen toxinas; los seres planctónicos, transparentes y gelatinosos, queman como un cristal puesto al fuego; algunos organismos en apariencia débiles y blanduchos tienen en su cola la fuerza del berbiquí, perforando la roca hasta crearse una caverna de refugio en sus duras entrañas... Y los tímidos moluscos, de carne dulce y temblona, se habían fabricado los fuertes escudos de sus valvas, dos murallas cóncavas que al abrirse son puerta y al cerrarse son casa.

Trepan por los troncos de las palmas y hacen caer los cocos al suelo. Pero ¿cómo se las componen para romper la cáscara de los cocos, siendo tan dura que hace resistencia hasta al hacha? Introduciendo una de sus tenazas por uno de los tres ojos que hay en la cáscara y haciéndola voltear como un berbiquí. ¿Se comen esos cangrejos?

El de la cicatriz y Old Sam bajaron con un berbiquí, un cortafrío y un mazo a la bodega, y se les oyó golpear por dentro largo rato. Al cabo de un momento salieron los dos a cubierta. El capitán llevó los planos y los instrumentos de su cámara a la ballenera; algunos sacamos de nuestros cofres el dinero que guardábamos.