Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 24 de mayo de 2025


Diez días para llegar a Río Janeiro, la escala más próxima: ¡diez días de vida común! ¡Toda una existencia cuyo vacío había que poblar con diversiones y nuevas amistades!... Y la fiesta del cumpleaños del Emperador, la primera del viaje, difundía por el buque un regocijo de escolares que empiezan sus vacaciones.

Cumplió bastante bien con sus deberes escolares. No descolló gran cosa entre sus condiscípulos de primeras y segundas letras, pero tampoco fue de los últimos. Se creía muy en su puesto estando donde estaba, y por eso jamás tuvo celos de los que le precedían, ni miró con desdén a los que iban detrás. Cuando llegó el momento de elegir una carrera, hubo grandes porfías en su casa.

Sin obligaciones escolares ; desligado yo de las trabas de mis negocios apremiantes, porque, en previsión de este caso, he ido arreglando las cosas a mi gusto con el sosiego y el pulso necesarios; libre , libre yo, con el tiempo y el dinero de sobra en aquella comarca tan alegre y tan saludable... Peleches, por , no es gran cosa para divertirse una mocita como ; pero a dos pasos está la villa donde hay un poco de todo lo que hay aquí, hasta gentes bien educadas, con su correspondiente sociedad y respectivas diferencias de nivel, pero sencillo y noble y aun patriarcal si se quiere; y además de ello, pintorescas y sanas costumbres populares, horizontes admirables y ambiente salutífero.

Los toques de la campana eran pesados y lentos.... Cesaron, y, un instante después, estalló en todas las torres un repique bullicioso y plácido, retozón e infantil, como si convocara turbas escolares, como si los tañedores fuesen angelillos traviesos escapados del cielo. ¡Las misas de aguinaldo! ruido en la habitación contigua. Tía Pepilla se había levantado, y no tardó en llamarme.

Eran catorce, todos rubios como unas candelas, y corpulentos y sanos á fuer de legítimos hijos de la verde Erin. Su edad variaría entre diez y seis y veinticuatro años. Aquellos escolares simbolizaron á mis ojos un tributo de respeto y de agradecimiento que la católica Irlanda sigue pagando á la nación católica por excelencia.

Aquella noche D. Alonso y Marcial siguieron conferenciando en los pocos ratos que la recelosa Doña Francisca los dejaba solos. Cuando ésta fue a la parroquia para asistir a la novena, según su piadosa costumbre, los dos marinos respiraron con libertad como escolares bulliciosos que pierden de vista al maestro.

La adoraba, y refería a ella todos sus actos, sus pensamientos, sus esfuerzos, sus ambiciones, sus sueños, sus éxitos escolares, su gloria militar, sus primeros premios y sus primeros galones. Al día siguiente de haber sido citado en la orden del día, escribió a Liette: «Estaba tan orgulloso que oía latir «tu» corazón

Calló Maltrana, como para reflexionar mejor, y luego añadió: Yo no me burlo por eso de los catedráticos de Salamanca ni los considero ignorantes. Sabían lo que podía saberse en su época y defendían sus conocimientos. Un niño de hoy sabe más que ellos y puede reírse de su ciencia; pero falta saber cómo reirán los escolares del siglo XXV de los sabios que ahora veneramos.

Creo que, en un futuro próximo, el uso de soportes lingüísticos en el internet seguirá creciendo al mismo tiempo que otras actividades relacionadas con la tecnología, por ejemplo el uso de CD-ROM para instituciones escolares que no tienen suficientes computadoras conectadas al internet.

Cuando los del lugar vieron tan de improviso vestidos de pastores a los dos escolares, quedaron admirados, y no podían adivinar la causa que les había movido a hacer aquella tan estraña mudanza.

Palabra del Dia

tundas

Otros Mirando