Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 2 de junio de 2025


Ya la señorita está ataviada: un traje primoroso realza su figura: primor sobre primor. «Está elegantísima», observa la señora al esposo. «, , dice éste, muy elegante, muy linda». Y recordando las palabras de un pedagogo argentino agrega: «Pero hay que ser también «paqueta» por dentro: que a la figura elegante no corresponda un espíritu deforme». La señora confía en que la niña será siempre muy buena. «Es nuestra hija», termina. «Es verdad, asiente el padre conmovido ; será buena, porque es nuestra hija».

Lienzos en que el genio imitó la Naturaleza, mármoles en que palpitó la vida, páginas preñadas de ciencia y poesía, prodigios del arte y maravillas de la industria... todo fue destruido, y sobre un montón de escombros humeantes quedó Luz aún viva, pero desgarradas las carnes, bañada en su propia sangre, espantosa, mutilada y deforme.

Únicamente ellos parecen dotados de las cualidades necesarias para bailar sus danzas nacionales con aquel fuego y aquella inspiración, con aquellos gestos tan llenos de vida y movimiento, con aquella flexibilidad y cadencia con que cada miembro lleva el compás de la música, y á la par con toda libertad y con ese miramiento al decoro, sin el cual la danza es un deforme esqueleto ó una indecencia.

Cuando pasan de dicho grado, y tocan en lo trágico, son malas representaciones artísticas, porque son pasiones, defectos y dolores impurificables que no se hermosean. No producen ya lo cómico, ni menos lo patético, sino lo deforme y lo repugnante y asqueroso; realismo deplorable de que hoy padecen el drama y la novela.

La patria, señor inglés, es la madre común, que lo mismo cría y agasaja al hijo deforme y feo que al hermoso y robusto. Olvidarla es de ingratos; pero menospreciarla en público indica sentimientos quizás peores que la ingratitud. Esos sentimientos, peores que la ingratitud, los tengo yo, según usted dijo el inglés.

Aquel que llevaba, de cabeza deforme, no era suyo, sino de una compañera que andaba con un ciego de violín, borracha ella, y si a mano venía, tomadora.

Me acordé de un pobre que me pidió limosna esta mañana... Era un infeliz que tiene una pierna deforme y repugnante, llena de úlceras... Me pidió limosna y le arrojé una moneda de cobre, diciéndole con horror: «Quítese usted de delante de , so pillete». Pues esta noche he tenido aquí la visita de aquel hombre... Le he visto, como te estoy viendo a ti, y primero me inspiraba repugnancia, después compasión, y acabé por decirle: «¿Quieres cambiarte conmigo?». Porque con su pierna podrida, su muleta y su libertad, disfruta él de una tranquilidad que yo no tengo.

Es algo monstruoso; lo que llamamos un macrocéfalo, es decir, que tiene la cabeza muy grande, deforme. ¡Misterios de la herencia fisiológica! Su madre me pregunta si toda aquella gran testa estará llena de talento. Yo le digo que su delirante ambición y su vicio mental le darán una descendencia de cabezudos raquíticos... El chico es gracioso y de una precocidad alarmante...

El ministerio ú oficio de este supremo directorio había de ser ordenar las manifestaciones del espíritu colectivo, sin el cual la nación se desmenuzaría y no sería nación, sino conjunto material, inarmónico y deforme de individuos que en lo tocante á la comunión de los espíritus quedarían aislados, y no con vida sino con muerte colectiva.

Por la escalera de anchos peldaños y monumental balaústre de piedra bajaba dificultosamente, con la lentitud y el balanceo con que caminan los osos puestos en dos pies, una pareja de seres humanos monstruosa, deforme, que lo parecía más viéndola así reunida: el Arcipreste y su hermana.

Palabra del Dia

rigoleto

Otros Mirando