Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 18 de junio de 2025


No contentos con haber matado a la tripulación china ni con haberse apoderado de los depósitos de trépang, que debían proporcionarles abundantes comilonas, parecían querer apoderarse también de los últimos supervivientes y del junco, creyéndolo cargado de víveres, y, sobre todo, de licores.

Sirviéronle en este acto de cómplices dos hermanos de la víctima: fingieron una huelga campestre diciendo que iban á ver á un pariente muy ilustre, aderezóse todo lo necesario, y la pobre señora creyéndolo se compuso lo mejor que pudo y con sus mas costosos aderezos.

La primera vez que se presentó a ellos con su madre acogiéronle con grandes agasajos. Después, al volver solo, aún le recibieron con cierto afecto, creyéndolo poseedor de la herencia y en camino de ser un personaje que extendería su protección sobre toda la familia.

Creyéndolo un religioso como Dios manda, entregado á sus oraciones, lo saludé y seguí mi marcha hacia Léminton, donde vivo y me gano el sustento como batanero que soy. Pero á los pocos pasos que me llamaba; volvíme y me preguntó si tenía noticia de la nueva indulgencia concedida á favor de los monjes del Císter. "No," le contesté.

La madre, luego de varios intentos para despertar a su esposo, sin conseguir otro éxito que palabras incoherentes seguidas de nuevos ronquidos, había rezado hasta el amanecer por el alma del señor de la torre, creyéndolo muerto. Margalida, que dormía cerca de su hermano, le había llamado con voz queda y angustiosa al oír los primeros tiros. «¿Oyes, Pepet?...»

Celebraba mucho este encuentro, creyéndolo casual, y el príncipe no quiso hablar de su visita al Museo, para que Novoa ignorase que había venido en busca suya. Maquinalmente empezaron á pasearse entre la fila de cañones y unos cuantos árboles que daban pálida sombra á este lado de la plaza.

Pep y su mujer seguían creyéndolo el señor; Margalida y su hermano le veneraban como un ser poderoso venido de lejanas tierras, por ser Ibiza el mejor lugar del mundo; pero a pesar de esto, otras preocupaciones parecían reflejarse en sus ojos. La visita de tantos atlots y la modificación que esto había traído a sus costumbres les hacía ser menos solícitos con don Jaime.

Más es; aun creyéndolo, jamás lo hubiera comprendido; como no lo comprenden muchos, que ni viven tan retiradas, ni son tan estrictas como lo era la duquesa. Si se le hubiera dicho que había apologistas del divorcio, y hasta detractores de la santa institución del matrimonio, habría creído estar soñando, o que se acercaba el fin del mundo.

Mucho hablamos allí y muchísimo más nos quedó que hablar acerca del célebre agustino, de sus inspiradas poesías, de sus hermosos escritos en prosa, del error en que se estuvo mucho tiempo creyéndolo hijo de Granada, por haberlo confundido con el otro insigne Fray Luis, y del excelente drama del segundo Marqués de Gerona, titulado Fray Luis de León.....

Creyéndolo así Julián, y no pareciéndole cortés desairar a su huésped, cargó la mano en la sopa y el cocido. Grande fue su terror cuando empezó a desfilar interminable serie de platos, los veintiséis tradicionales en la comida del patrón de Naya, no la más abundante que se servía en el arciprestazgo, pues Loiro se le aventajaba mucho.

Palabra del Dia

aconséjele

Otros Mirando