Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 13 de julio de 2025
Constantemente estábamos visitando sitios desconocidos, puertos en donde no había entrado aun el europeo. Sil Wilkins, mi capitán, era un hombre de genio. Con frecuencia teníamos que batirnos, ya con los merodeadores chinos del golfo de Tonkín, como con los piratas moros que pululan por aquellas latitudes, y dan muestra de un valor y de una audacia asombrosos.
¡Una reparación! exclamó el óptimo don Feliciano. ¡Qué más da que la exigieras, rapaz! ¿Se negaría usted a batijse conmigo? preguntó el ayudante con su voz campanuda. ¿A qué habíamos de batirnos? A lo que usted quiera.
Marcos dijo Hullin tras un instante de silencio , ¿puedo hablar delante de tu mujer? Ella y yo somos una sola persona. Pues bien, Marcos, vengo a comprarte pólvora y plomo. Para tirar liebres, ¿no es verdad? dijo el contrabandista guiñando los ojos. No; para batirnos con los alemanes y los rusos. Hubo un instante de silencio. ¿Y necesitarás mucha pólvora y mucho plomo?
Pero hablemos de usted: ¿qué le trae aquí á estas horas?... Tardó Pirovani en contestar, para que de este modo sus palabras resultasen más solemnes. El señor de Canterac cree que debamos batirnos á muerte después de lo de esta tarde.
Otro ejército, sí, compuesto de Guardias de Corps, acostumbrados a hacer la guerra en los palacios, de estudiantes, de paletos y contrabandistas dijo Santorcaz, dando tregua a las bromas y hablando con completa seriedad . Es una desgracia para nosotros el tener que confesar que no podemos batirnos con los franceses. ¿Qué importa que se armen multitud de paisanos, si esas turbas indisciplinadas, antes que ayuda, serán elemento de ruina para el escaso ejército español? ¿Qué obstáculo pueden ofrecer a los que han sometido la Europa entera estos infelices alucinados, a quienes engaña su ignorancia? ¿Tienen idea de lo que significan la previsión, la táctica, el genio de un jefe experto, para decidir la victoria?
Tuvimos bastante con Napoleón: no hay que repetir la aventura. Vamos á batirnos por nuestra seguridad y al mismo tiempo por la seguridad del mundo, por la vida de los pueblos débiles. Si fuese una guerra de agresión, de vanidad, de conquista, nos acordaríamos de nuestro antimilitarismo. Pero es de defensa, y los gobernantes no tienen culpa de ello.
De ese desgraciado de Labarbe, que no ha sabido defender el desfiladero del Blutfeld. Bien es cierto que ha muerto cumpliendo con su deber; pero eso no repara el desastre, y si Piorette no llega a tiempo de socorrer a Hullin, todo se habrá perdido; será preciso abandonar el camino y batirnos en retirada. ¡Cómo! ¿El Blutfeld ha sido tomado?
Sin embargo, cada cual es libre de hacer lo que quiera y puede deponer las armas y volver a su aldea; pero los que quieran vengarse ¡que se unan a nosotros!: con nosotros partirán el último pedazo de pan y agotarán el último cartucho. El anciano almadiero Colon se levantó, y dijo: Hullin, todos estamos contigo; hemos comenzado juntos a batirnos y juntos terminaremos.
No estoy seguro de que fuese ella el objeto de nuestra reyerta, pero sé muy bien que el mismo día que íbamos á batirnos desapareció de la venta en compañía de Ivón, el arquero aquel de Gales ¿te acuerdas?
La gente de leva se había educado en el heroísmo, sin más que dos horas de aprendizaje, y nuestro navío, por su defensa gloriosa, no sólo era el terror, sino el asombro de los ingleses. »Estos necesitaron nuevos refuerzos: necesitaron seis contra uno. Volvieron los dos navíos que nos habían atacado primero, y el Dreadnoutgh se puso al costado del San Juan, para batirnos a medio tiro de pistola.
Palabra del Dia
Otros Mirando