Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 16 de mayo de 2025
Es un honor que haya descendido un rey hasta tus plantas. Gracias, gracias. Pero, vamos, cuenta, cuenta, hija mía, con ese graciosísimo pico que Dios te ha dado. Me tienes impaciente. ¿Cómo fue la cosa!... Pues verá usted. ¿Se acuerda de la conversación que tuvimos al otro día de la fiesta que dió usted para presentar en sociedad a sus sobrinas Carmen y Lucía? Hago memoria.
Ascendía la suma a treinta mil reales, los veinte mil dados por Feijoo, y diez mil y pico que habían producido desde aquella fecha, colocados por Torquemada en préstamos a militares.
Ningún patricio romano tuvo jamás una idea más perfecta del sui juris, de los sagrados derechos que «la ciudad» había depositado en sus manos. Desde que esto acaeció, don Jaime, a pesar de sus cincuenta y pico de años, pasó a ser en sus manos una verdadera cosa como previene la Instituta.
Entre tanto, Ana pensaba que tal vez no había entre aquella muchedumbre que admiraba su hermosura otro más digno de poseerla que aquel don Víctor, a pesar de sus cuarenta y pico, pico misterioso.
25 Y si me hicieres altar de piedras, no las labres de cantería; porque si alzares tu pico sobre él, tú lo ensuciarás. 26 Y no subirás por gradas a mi altar, para que tu desnudez no sea descubierta junto a él. 2 Si comprares siervo hebreo, seis años servirá; mas al séptimo saldrá libre de balde. 3 Si entró solo, solo saldrá; si tenía mujer, saldrá él y su mujer con él.
Mi tío tenía razón; no sois el Pico de la Aguja Verde. ¿El Pico de la Aguja Verde? preguntó sorprendido. Sí, mi tío pretendía... pero ¿qué importa eso? ¿Quién os ha dicho lo que ignorabais al partir? Mi padre, el señor de Pavol, y un montón de cosas que he venido recordando desde hace dos meses. ¿Es cierto, entonces, que el amor atrae al amor? Nada es más cierto, mi querida novia.
Ello es que Amparo iba teniendo un pico de oro; se la estaría uno escuchando sin sentir cuando trataba de ciertas cuestiones. El taller entero se embelesaba oyéndola, y compartía sus afectos y sus odios.
Al ruido de las aguas de la mina se mezcla á veces el sordo rumor de las aguas exteriores que un desgraciado golpe de pico puede hacer inundar repentinamente la galería.
Don José quería tanto a su ahijada y gustaba tanto de verse próximo a ella, que aceptó gozoso. Las primeras explicaciones tuvieron poco éxito. Isidora no podía comprender aquel endiablado mete y saca de hilo superior, que por tantos agujerillos tiene que pasar hasta que lo coge en su horadado pico la aguja, y empieza, debajo de la placa, la rápida esgrima con el hilo interior.
Aquella planta, traída de tan lejos y por la cual demostraba especial interés el padre de Magdalena, decía ella que le había sido enviada en recuerdo de una expedición al pico de * por un compañero de viaje a quien se atribuía vagamente mucha amabilidad, mucha cultura y previsión y muchas consideraciones respecto al señor D'Orsel.
Palabra del Dia
Otros Mirando