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Actualizado: 24 de junio de 2025
Y ella que, cuando amenaza con lo innoble del rasero nivelador, justifica las protestas airadas y las amargas melancolías de los que creyeron sacrificados por su triunfo toda distinción intelectual, todo ensueño de arte, toda delicadeza de la vida, tendrá, aún más que las viejas aristocracias, inviolables seguros para el cultivo de las flores del alma que se marchitan y perecen en el ambiente de la vulgaridad y entre las impiedades del tumulto.
A los seis años de la decolacion del niño Pelayo, padecen martirio Vulfura y Argentea ; luego Almanzor, que como violento torbellino penetra cincuenta y dos veces por los dominios de la España católica, llena las mazmorras de cautivos cargándolos de pesadas cadenas ; por último, á impulso de su desprecio altanero y cruel perecen en tenebrosas cárceles el ejemplar Domingo Sarracino y sus compañeros.
8 El justo es librado de la tribulación; mas el impío entra en lugar suyo. 9 El hipócrita con la boca daña a su prójimo; mas los justos son librados con la sabiduría. 10 En el bien de los justos la ciudad se alegra; mas cuando los impíos perecen, hay fiestas. 11 Por la bendición de los rectos la ciudad será engrandecida; mas por la boca de los impíos ella será trastornada.
Todos los jóvenes de tu edad se perecen por ir allá; decía tía Pepa sólo tú, como un viejo chocho, te estás entre las cuatro paredes. Allí estaba yo bien, cerca de Angelina. No me cansaba de mirarla: cada palabra suya era para mí un poema. Era yo muy dichoso. ¡Qué mayor ventura que no separarme de su lado!
Hullin, frente a tan lúgubre espectáculo, permaneció clavado a la tierra y no podía apartar de él los ojos. Los grandes dolores humanos tienen el raro poder de fascinarnos; queremos ver cómo los hombres perecen, con qué cara afrontan la muerte; los mejores espíritus no se hallan exentos de esa horrible curiosidad. ¡Dijérase que la eternidad va a revelarnos su secreto!
Los hijos de este siglo, la Sapiencia Nos enseña, que son muy mas prudentes, Que no los muy dotados de inocencia, Para el vivir y trato de las gentes. Aquellos que no tienen tal prudencia Perecen con dos mil inconvenientes, Llevándoles ventaja los osados, Astutos y sagaces y treznados.
6 ¿Es éste tu temor, tu confianza, tu esperanza, y la perfección de tus caminos? 7 Acuérdate ahora, ¿quién haya sido inocente que se perdiese? Y ¿adónde los rectos han sido cortados? 8 Como yo he visto que los que aran iniquidad y siembran injuria, la siegan. 9 Perecen por el aliento de Dios, y por el espíritu de su furor son consumidos.
Ignoro absolutamente la aventura de que me hablais; presumo, sí, que generalmente los que manejan los negocios públicos perecen á veces miserablemente, y que bien se lo merecen; pero jamas me informo de los sucesos de Constantinopla, contentandome con enviará vender allá las frutas del huerto que labro.
Perecen muchos, y los que consiguen salvar, a los veinte años son viejos.... Las damas y los pocos caballeros que con ellas habían venido, le escuchaban con atención y con pena. Jamás habían visto un cuadro tan espantoso. El trabajo, que es por sí un castigo, aquí se complicaba con el envenenamiento.
En tal caso, los primogénitos perecen; y sólo muy abajo, entre los obscuros segundones de alguna clase pariente, surge la nueva serie que ascenderá más arriba. El hombre fué, no su hijo, sino su hermano, un hermano cruelmente enemigo suyo. Helo aquí, el fuerte entre los fuertes, el ingenioso, el activo, el cruel rey del mundo.
Palabra del Dia
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