Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 5 de junio de 2025
»Sí, me reputan de lumbrera científica, porque he penetrado un poco más que otros de mis compañeros en los misterios del organismo humano; porque cuando tomo el pulso del enfermo suelo adivinar el mal que padece; porque he tenido en ocasiones la suerte de curar ciertas dolencias que otros más ignorantes que yo tenían por incurables.
El ambiente bañado y penetrado todo de rayos de sol parece luz de oro y sol y no aire; y el hierro, que sale candente de la fragua, no es oscuro y opaco, sino refulgente como el fuego de donde sale; y por igual manera, en cuanto la comparación material es posible, el alma que se unió con Dios parece Dios.
Paréceme que he penetrado la idea; y por lo mismo, quiero decir, por el alcance que tiene, me atrevo a recelar que es la señora marquesa la que no me ha comprendido a mí... No quise llegar tan allá... Pues como si hubiera querido, o para cuando llegue..., y sin llegar, valga lo dicho, téngalo en cuenta y acabemos.
La espada había penetrado torcida, atravesando al toro y asomando su punta por uno de los costados, junto a una pata delantera. Todos gesticulaban y braceaban con aspavientos de indignación. ¡Qué escándalo! ¡Aquello no lo hacía ni un mal novillero!...
Por otra parte, se hace necesario rectificarlas, habiendo penetrado hasta en los diccionarios de conversación y en los manuales de historia de la literatura, á lo menos en lo más esencial, para que, en su lugar, se sustituyan nociones exactas, fundadas en pruebas concluyentes y auténticas.
Consideraba como una salvación poder marchar incesantemente. El frío de la altiplanicie había penetrado hasta sus huesos, dejándole yertos los brazos. En torno de su boca el aliento se convertía en escarcha. Los pelos de su bigote y de su barba se habían engruesado con una costra de hielo. Todo el calor de su vida parecía concentrarse en su cabeza y sus piernas.
Vistos de lejos, por corto tiempo, seducían con el encanto de la novedad; pero él había penetrado en sus costumbres, casi era uno de ellos, y le pesaba como una caída en la esclavitud esta existencia inferior, en la que chocaba a cada instante con ideas y prejuicios de su pasado. Debía alejarse de este ambiente; pero ¿adonde ir? ¿cómo escapar?... Era pobre.
Este cuadro tenía un fondo opaco y pardusco que advertía claramente de que la escoba no había penetrado jamás en aquel recinto. El polvo envolvía en su manto protector los muebles, los libros y los frascos de la habitación, y la tapizaba tan perfectamente que los pies no echaban menos la mullida alfombra.
Semejante a aquel palacio de los cuentos, en el cual se entraba por una puerta riendo y salíase por la otra llorando; ¡cuántos y cuántos habrían penetrado en el fatal recinto, con la sonrisa de la esperanza en los labios, y salido con las lágrimas del desengaño en los ojos!
Tan general era la afición al drama naciente, que convirtieron en teatro una mazmorra obscura de esclavos; tanto habían penetrado las comedias de Lope de Rueda en el corazón del pueblo, que, separados de su país largos años, sabían recitar sus trozos más bellos . Otra relación hubo también entre las cárceles de Argel y el teatro español.
Palabra del Dia
Otros Mirando