Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 12 de noviembre de 2025
10 La negra por el honor, de D. Agustín Moreto. 11 No está en matar el vencer, de D. Juan de Matos. 12 San Antonio Abad, de D. Fernando de Zárate. 1 Querer por sólo querer, de D. Antonio de Mendoza. 2 Sufrir más por valer menos, de D. Jerónimo Cruz. 3 Mentir por razón de Estado, de D. Felipe de Milán y Aragón. 4 No hay gusto como la honra, de D. Fernando de Vera y Mendoza.
Es probable que la tendencia tan moral de esta comedia ha sido el motivo, que ha llevado á muchos críticos á considerarla como la mejor de todo el teatro español. Nuestro juicio acerca de su mérito es muy diverso. Lope, Tirso, Moreto, Rojas y hasta el mismo Alarcón, han escrito otras obras de más ingenio en la invención, y de mucha más vis cómica, y de mayor gracia y elegancia.
A las primeras pertenece Le medecin malgré lui, prescindiendo por ahora de los trabajos de Calderón y de Moreto sobre el mismo asunto, de los cuales hablaremos en su lugar oportuno.
Bajo el título de La fingida Arcadia se sobrentiende, sin duda, la del mismo título de Moreto, y de El mejor amigo el muerto tratamos ya en el tomo IV, pág. 48.
11 La presumida y la hermosa, de D. Fernando de Zárate. 12 Celos aun del aire matan, de D. Pedro Calderón. 1 Varios prodigios de amor, de D. Francisco de Rojas. 2 San Francisco de Borja, de D. Melchor Fernández de León. 3 Dios hace justicia á todos, de D. Francisco de Villegas. 4 Yo por vos y vos por otro, de D. Agustín Moreto.
»Una celebridad tan universal y tan duradera no puede menos de fundarse en mérito extraordinario, sobre todo cuando se considera que esa celebridad no es debida, ni á ser la primera, ni mucho menos la única obra en su género conocida en España, ni tampoco á que su carácter trivial la ponga naturalmente al alcance del gusto poco delicado del vulgo... Si por una inconcebible fatalidad estuviese destinado á desaparecer de repente de la faz de la tierra nuestro antiguo teatro, y nos fuese dado salvar sólo una pequeñísima parte de él, cuatro dramas, como reliquia de tanta riqueza, nosotros, que tenemos en mucho las obras literarias de nuestra nación, no vacilaríamos en elegir, para salvarlos de ese espantoso naufragio universal, El Tetrarca, de Calderón; El desdén con el desdén, de Moreto; La verdad sospechosa, de Alarcón, y el García del Castañar, de Rojas.»
La primera jornada de D. Juan de Matos; la segunda, de D. Antonio Martínez; la tercera, de D. Juan de Zavaleta. 3 El buen caballero maestre de Calatrava, de Don Bautista de Villegas. 4 A su tiempo el desengaño, de D. Juan de Matos. 5 El sol á media noche y estrellas á medio día, de Juan Bautista de Villegas. 6 El poder de la amistad, de D. Agustín Moreto.
Sentado como se hallaba, así y en media voz, y ésta ronquilla, y más asomada a lo bronco que a lo apacible, se entretenía cantando de esta manera: MORETO Nací muy pobre, ¡oh qué dolor! Bien, pobre aun soy, mas esto es hoy mañana no. Que quien desprecia, ¡viva el valor!, en lid la muerte, al fin la suerte lo coronó. Lid haya y guerra sí, ¡vive Dios!, bien corra el dado, y de soldado a conde iré.
En El astrólogo fingido, de Calderón, impreso en 1637, se habla ya de El lindo Don Diego, de Moreto, como de una comedia famosa: de manera que su nacimiento no puede ser anterior al primer tercio del siglo XVII. Se supone que en los primeros años de su vida hubo de residir en Madrid, y los últimos en Toledo.
6 En el sueño está la muerte, de D. Jerónimo Guedeja Quiroga. 7 Los siete durmientes, de D. Agustín Moreto. 8 Los dos filósofos de Grecia, de D. Fernando de Zárate. 9 La lealtad en las injurias, de D. Diego de Figueroa y Córdova. 10 La Reina en el Buen Retiro, de D. Antonio Martínez. 11 Mudarse por mejorarse, de D. Fernando de Zárate.
Palabra del Dia
Otros Mirando