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Actualizado: 29 de julio de 2025
Otro Almugavar en esta misma guerra, á la lengua del agua, acometido de veinte hombres de armas, mató cinco antes de perder la vida. Otros muchos hechos se pudieran referir, si no fuera ajeno de nuestra historia, el tratar de otra largamente. La duda que se ofrece solo es del nombre, si fué de nacion, ó de milicia en sus principios.
Su padre consideraba indigno del mayorazgo de la casa de Montesinos el escribir un pedimento o trazar una carretera: a los abogados los llamaba curiales, a los ingenieros canteros, a los profesores maestrillos. La milicia le agradaba, pero sus ideas tradicionalistas le impedían mandar a su hijo a servir a un gobierno liberal.
Quedo el emperador Andronico sin la milicia extranjera, después que los alanos, y turcoples se apartaron de su servicio, tan falto de soldados que libremente se podia acometer cualquier empresa por grande que fuese en las provincias de su imperio, sin tener quien se lo impidiese.
Mas no se crea que deba entenderse condenado á ciego servilismo, y no haya de atreverse á discordar nunca de la autoridad de sus maestros; en la milicia científica y literaria, no es tan severa la disciplina que no sea lícito al soldado dirigir algunas observaciones á su jefe. La autoridad científica.
SANCHO. Nobles campos de Galicia, Que a sombras destas montañas, Que el Sil entre verdes cañas Llevar la falda codicia, Dais sustento a la milicia De flores de mil colores; Aves que cantáis amores, Fieras que andáis sin gobierno, ¿Habéis visto amor más tierno En aves, fieras y flores?
Había sido fundidor en su primera juventud, miembro activo de la Internacional de Trabajadores y asiduo oyente de los compañeros de oficio que, más felices que él, podían leer en voz alta lo que decían los papeles dedicados al bien del pueblo. Jugó a los soldados en tiempos de la Milicia nacional, figurando en los batallones que llevaban gorro rojo como signo de intransigencia federalista.
El señor Esteban asistía silencioso y de pie a este club vespertino, que traía recelosos a los de la Milicia Nacional de Toledo. Terminó la guerra y se desvanecieron las últimas ilusiones del jardinero. Cayó en un mutismo de desesperado: no quería saber nada de fuera de la catedral. Dios había abandonado a los buenos; los traidores y los malos eran los más.
D. Jacinto Rodriguez y demas gefes de la milicia, acordaron con ellos un convenio, con la condicion de que asistiesen á la villa con los víveres necesarios á la subsistencia de su vecindario.
El combate, para los viejos soldados que habían conocido las batallas más famosas de Europa, fue en adelante la «guazabara». La táctica, contenida en la Milicia Indiana, de Vargas Machuca, consistió en dar la «trasnochada» y dar el «albazo», o sea sorprender al enemigo astuto y escurridizo en plena noche o al romper el día.
Pudiéranse atajar, si la diversidad de cabezas que habia en nuestro ejército, tuvieran entera autoridad con los súbditos, y ellos estuvieran unidos; porque siempre, que un Príncipe usa de trazas tan indignas de su obligacion, como fué dar á los Catalanes moneda tan falta por su antiguo precio, y no mandar con universal edicto que la recibiesen todos los súbditos de su Imperio al mismo precio, es dar ocasion cierta de venir á rompimiento el pueblo y la milicia.
Palabra del Dia
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